SE VAN CONOCIENDO MÁS DETALLES DE SU DOBLE VIDA
'Frankie', como le llaman los amigos, quería influir en lo que él llamaba 'cuestiones de Estado'. Se hizo pasar por mediador de la vicepresidenta del gobierno y la Casa Real. Compartió varias comidas con Miguel Bernard, del sindicato 'Manos Limpias': le pidió que retirase la demanda contra la Infanta Cristina, porque estaban perjudicando a la Corona.
Francisco Nicolas hizo creer a su interlocutor que corría peligro por lo que estaba haciendo 'Manos Limpias' contra el independentismo catalán. Le dijo que necesitaba protección. Y le puso escolta privada a la puerta de casa durante dos meses.
Su lista de falsos cargos es extensa: asesor ministerial, ahijado de políticos, agente secreto del CNI. Pero su vida real es bien distinta: estudiante de Derecho, de un barrio de clase media de Madrid. Tas el revuelo, sus padres prefieren guardar silencio.
La duda es cómo consiguió engañar a tanta gente y cómo llegó a estrecharle la mano al rey el día de su proclamación. Una conocida empresaria niega haberle ayudado. A través de un comunicado, dice que acudió sola a la recepción real y que nunca intercedió para que él asistiese como invitado.