EEUU LE CAMBIÓ POR CINCO TALIBANES
Pocos detalles han trascendido sobre la liberación del Sargento Bowe Berdal, salvo que se realizó cerca de la frontera con Pakistán.
Acompañado por 18 talibanes, fue recogido por un helicóptero de las fuerzas especiales norteamericanas y el joven militar rompió a llorar.
La noticia se la daba personalmente por teléfono el presidente Obama a los padres de Bowe, que poco después comparecían con él en los jardines de la Casa Blanca.
El padre del soldado se dirigía a él pronunciando algunas palabras en lengua afgana. "Mi hijo tiene problemas para hablar en inglés", decía.
Berdal está siendo tratado en un hospital militar norteamericano en Alemania.
A cambio de su libertad, y con la mediación del gobierno qatarí, Estados Unidos ha trasladado a Afganistán a cinco presos talibanes de Guantánamo, como confirmaba el secretario de defensa: "Esto ha sido un intercambio de prisioneros de guerra".
Las conversaciones secretas con los talibanes y la liberación de los presos han recibido las críticas de algunos republicanos. Temen que ese intercambio abra la veda para el secuestro de más estadounidenses en el extranjero, y exigen conocer los detalles de una negociación que, según ellos, pone en peligro la lucha de Estados Unidos contra el terrorismo.