ESTABAN EN EL ÁREA MÁS AFECTADA POR LA TORMENTA
Los productores de lácteos en el oeste de Texas y el este de Nueva México siguen evaluando cuántas cabezas de ganado murieron en la tormenta invernal del fin de semana pasado, pero la cifra superará las 30.000, según ha confirmado un funcionario de un grupo lechero.
Aproximadamente, unas 15.000 vacas lecheras adultas fallecieron en el área más afectada por la tormenta, donde se encuentran la mitad de los diez principales condados productores de leche en el estado y se genera el 40% de la leche de Texas, tal y como recoge AP.
La cifra de animales jóvenes muertos por la tormenta en cada estado podría ser igual a la de vacas maduras, agregó. Las pérdidas afectarán la producción durante un año.