SE PONE EN CUESTIÓN LA TREGUA
Era la primera vez que los libaneses interceptaban un barco cargado con armas para los rebeldes sirios. Procedía de Libia e hizo escala en Egipto antes de ser capturado. Esto es lo que había en su interior: ametralladoras pesadas, obuses, explosivos, municiones.
Este golpe a la revuelta siria se debe a que las autoridades libanesas no quieren involucrarse en la crisis del país vecino por temor a las posibles repercusiones en su territorio. La operación tiene como telón de fondo las negociaciones para el desembarco en Siria de 300 cascos azules. Se espera que los 30 primerostrabajen a partir del lunes.
Por ahora hay sobre el terreno una avanzadilla de seis observadores. Deben ayudar a crear una paz que en teoría solo deberían supervisar porque existe un acuerdo, en vigor desde el 12 de abril, que estipula el cese de las hostilidades y la retirada de los tanques de las ciudades.
Pero estas imágenes supuestamente grabadas en Douma, a diez kilómetros de la capital Damasco. demuestran que está pasando lo contrario. No solo los soldados de Bachar el Assad no han cesado a violencia, sino que multiplican las violaciones del plan de paz. La oposición acusa al Ejército de reanudar sus bombardeos cuando los observadores abandonan las ciudades visitadas.