64 VÍCTIMAS MORTALES
Un operativo de más de 500 efectivos continúa este domingo desplegado en Pedrógão Grande para vigilar que no se producen reactivaciones del incendio que arrasó el centro de Portugal y dejó 64 víctimas mortales, declarado "extinto" el sábado.
Según los últimos datos de Protección Civil, en el terreno permanecen 528 bomberos y efectivos de otros cuerpos de seguridad y emergencia y casi 200 vehículos terrestres. El fuego de Pedrógão Grande comenzó el sábado día 17 y quedó controlado el miércoles, pero dentro del perímetro todavía existía riesgo de nuevas reactivaciones, lo que provocó que no fuese declarado "extinto" hasta una semana después de su inicio.
Este gran fuego, con varios focos que llegaron hasta 40 kilómetros al norte de donde se inició, asoló el centro de Portugal dejando a su paso 64 víctimas mortales, más de 250 heridos y decenas de miles de hectáreas arrasadas.
Los cuerpos de los 64 fallecidos ya han sido identificados y han empezado a ser entregados a las familias. Tras finalizar el combate contra el fuego, el país se centra ahora en investigar las causas y las responsabilidades que se puedan derivar de la mayor tragedia forestal de la historia de Portugal.
Protección Civil admitió que entre el fatídico sábado y el martes se produjeron fallos en el sistema de comunicaciones que coordina a las fuerzas de seguridad y emergencia de Portugal.
El primer ministro luso, António Costa, pidió "explicaciones" a la ministra de Administración Interna, Constança Urbano de Sousa, sobre estos fallos en las comunicaciones, para analizar si pudo influir negativamente en la gestión de la tragedia.