EN MANILA (FILIPINAS)
Un filipino fotografió a su asesino pocos instantes antes de que lo matara. El fallecido, un guarda de seguridad, estaba realizando una fotografía de su familia cuando en la instantánea se coló Michael González, su verdugo.
Apareció apuntándole con un arma en la última fotografía que tomó a su familia antes de morir, informaron hoy fuentes oficiales. Esta imagen ha servido para detener al asesino, que fue encontrado horas después en un suburbio de Manila (Filipinas).