SERIE CARGADA DE PRECISIÓN, ESTUDIO Y SUERTE
La gota no es una cosa fácil de documentar, requiere de paciencia suere y el acertar con el disparador en el momento correcto. El resultado, sin embargo, es absolutamente impresionante. Su impacto se refleja en el agua y muestra las gotas con un tenue tono de rosas y azules.
La parte más difícil de este proceso de captación era realizar los cálculos necesarios para producir una foto con éxito. Después de mucho ensayo y error, Augusteijn determina la ubicación exacta en la que la gota y la bala se encuentran.
Capaz de perfeccionar su técnica, Augusteijn es capaz de medir una cantidad de las gotas de agua que hace falta utilizar en de una válvula de liberación gradual.
En el momento del disparo se activan simultáneamente el obturador de la cámara y el gotero. El increíble proceso sólo dura unos 28 milisegundos para completarse y crear una imagen que se congela en el tiempo.