La píldora anticonceptiva pronto dejará de ser un asunto exclusivamente de mujeres. Científicos israelíes han concluido con éxito los ensayos en laboratorio de un fárcamo esterilizador.
La píldora masculina desactiva la proteína presente en el esperma que permite fecundar el óvulo. Lo más importante es que no tendrá efectos irreversibles ni cambiará el comportamiento sexual de los hombres.