SOMOS MÁS INTELIGENTES
Se cree que, desde hace 30.000 años hasta ahora, el volumen de nuestro cerebro se ha reducido un 10%, el equivalente a una pelota de tenis.
Los antropólogos han realizado mediciones a partir de "cráneos" hallados en Europa, África y Ásia, y concluyen que esta disminución del cerebro no significa que los hombres modernos tengan menos capacidades intelectuales que sus ancestros, sino que han desarrollado formas de inteligencia más sofisticadas.