ITALIA
Se siente negra. No de color. Cécile Kyenge nació en la República Democrática del Congo. Es doctora en medicina y, desde hace tres meses, ministra de integración italiana y objeto de insultos xenófobos por parte de algunos poliíticos. El más reciente, el del exministro y vicepresidente del Senado Roberto Calderoli. Calderoli, miembro del partido ultraderechista Liga Norte, dijo en un mitin que no puede dejar de pensar en un orangután cuando ve a la ministra. El comentario ha provocado una oleada de críticas. La prensa ha pedido que dimita. Él ha pedido disculpas pero se aferra al cargo.
"No es un ataque personal, si no a mis políticas de gobierno, el asunto está cerrado", ha asegurado Kyenge. Otro miembro de la Liga Norte, asesor de inmigración, ha comentado en Facebook que llamar a Kyenge orangután es insultar a los animales.
Según el primer ministro italiano, Enrico Letta, "esto no hace más que aumentar la tensión. Desde aquí le digo al presidente de la Liga Norte que esto no puede continuar. Páralo. Haz que se acabe. Ya hemos pasado suficiente vergüenza".
La clase política italiana ha arropado a una ministra que atesora una lista demasiado larga de ofensas. Todo comenzó cuando una exconcejal de la Liga Norte animó a que alguien violara a la responsable de inmigración, tras el intento de agresión sexual de un africano a dos chicas de Padua.
El profesor de la Universidad Americana de Roma James Walston ha afirmado que hay muchos italianos "que son claramente racistas, empezando por el propio Berlusconi, que dijo que Obama era joven, guapo y bronceado". La Liga Norte, antiguo socio de gobierno de Berlusconi, ha convocado para septiembre una gran manifestación contra la inmigración ilegal.