8 DE CADA 10 CONDUCTORES INTENTAN AHORRAR
Hoy, llenar nuestro depósito es más barato que en las mismas fechas de 2014. Si repostamos gasolina, nos costará una media de 65 euros. En un mismo coche, pero con diesel, pagaremos casi 9 euros menos. Es la mayor diferencia desde hace una década.
En la carretera estos días la pregunta no es quién intenta ahorrar en combustible. Lo hacemos todos. La clave está en preguntar cómo ahorrar mejor, porque es ahí donde se falla. Más allá de comparar los precios, hay muchas fórmulas, y todas depende del conductor.
Antes de viajar, lo primero es revisar los neumáticos. La falta de presión incrementa un 3% nuestro gasto.
Ya con el coche en movimiento, el objetivo es llegar a la marcha más larga lo antes posible. Y sí, podemos saltárnoslas. "Puedes arrancar en primera, pasar a tercera, y si el terreno sigue siendo favorable, o bien acelerando un poquito, pasando a quinta", apunta José María Ginés, monitor de conducción.
Y aunque el calor apriete, las ventanillas mejor cerradas. Con mantener el coche a 22 grados con el aire acondicionado, es más que suficiente. Y cuidado con el peso, porque algo tan sencillo como sacar del coche objetos que no necesitamos puede ayudarnos a ahorrar hasta un 10% en combustible.