2.500 millones de euros al año en subvenciones
El proyecto de ley del Gobierno para flexibilizar la gestión de las televisiones autonómicas, que abre la puerta a la privatización, ha pasado su primer trámite parlamentario con el rechazo de las cuatro enmiendas a la totalidad presentadas por la oposición.
Sin embargo, el PP ha expresado su disposición a negociar cambios en ese proyecto legislativo durante su tramitación parlamentaria. El proyecto ha sido defendido ante el pleno de la Cámara por el ministro de Industria, Energía y Turismo, José Manuel Soria, quien ha insistido en que se trata de ampliar la libertad y la capacidad de elección de cada comunidad respecto al modelo de televisión que desean.
Con esta reforma, el ejecutivo pretende solventar la "difícil situación económica" de gran parte de las televisiones autonómicas españolas, y permitir recuperar su viabilidad económica.
El ministro ha insistido en que no se trata de una "obligación" sino de una reforma que abre la puerta a que, dentro de la flexibilidad, las comunidades autónomas decidan cómo quieran gestionarse, si a través de medios privados, totalmente públicos, o a través de una gestión dual que combine los anteriores.
Los portavoces de los grupos de la oposición han criticado el cambio de modelo y han acusado al Gobierno de pretender con esos cambios favorecer a "sus amigos" y de poner en peligro el servicio público que prestan estos canales.