OBTIENE UN BENEFICIO DE 2.000 MILLONES
La eléctrica Endesa registró en 2012 un beneficio neto de 2.000 millones de euros, un 8 % menos que en el anterior ejercicio. Así lo ha anunciado esta mañana el presidente de la compañía ante la junta general de accionistas. En su discurso, Borja Prado ha criticado la reforma energética del Gobierno para reducir el déficit tarifario, pero alaba la política económica general.
Durante su intervención en la Junta General de Accionistas de la compañía, Prado ha explicado que las medidas aprobadas el pasado año tuvieron un impacto de 313 millones de euros en las cuentas de la empresa en 2012.
A esto hay que añadir las nuevas normativas aprobadas en los primeros meses de 2013, entre las que destaca el proyecto de ley de sistemas eléctricos extrapeninsulares, que según Prado, podría tener "consecuencias graves y discriminatorias" que todavía no han sido cuantificadas.
Esta normativa -que prevé medidas para fomentar la competencia en los sistemas extrapeninsulares y el traspaso de la titularidad de las centrales de bombeo y regasificadoras a los operadores del sistema- "solo afectaría negativamente a Endesa".
Además de esta normativa, el Gobierno ha aprobado este año una serie de impuestos adicionales y recortes que afectan a la generación eléctrica y a las renovables con el objetivo de atajar el déficit de tarifa, desfase generado entre los ingresos y los costes del sistema.
En este contexto de reformas energéticas, el presidente de la eléctrica ha defendido que la compañía "ha reaccionado siempre con la actitud más abierta posible". A pesar de la "preocupación por la regulación del sector eléctrico", Prado ha reconocido "el acierto y los méritos de la política económica del Gobierno del señor Rajoy" y le ha animado "a mantenerse firme en sus decisiones de ajuste" y reforma estructural.
"No tengo ninguna duda que este país con este Gobierno logrará pronto la recuperación económica", ha afirmado. Prado ha recordado que, para adaptarse a la situación económica actual, Endesa ha propuesto suprimir el dividendo y reducir en un 25 % la retribución de los consejeros.