Aurora conoce al hijo de Conrado

Francisca hace las paces con María y le pide que se encargue de la educación de Bosco. Sin embargo, Gonzalo, Aurora y Rosario sospechan de las intenciones de la Montenegro.

Nicolás ha comprado la nueva casa de los Buendía, con la granja. Mariana no está convencida del todo pues pretendía marcharse de Puente Viejo para alejarse de Francisca. Pero todo esto se lo oculta a su marido.

Conrado está preocupado por su nueva situación: la aparición de Alicia con el hijo de ambos, David. Le propone a Aurora que Alicia y David se alojen en Puente Viejo y Aurora cede. Sin embargo, Aurora se entera de que ya se había tomado la licencia de llevarla a la posada del pueblo, y riñe con él. Además, reconoce a David como el niño que le habían llevado al dispensario.

Francisca convence a Bosco de acabar con la relación de María y Gonzalo, y él acepta. También le advierte de no tocar a Bicho, el potro salvaje, pero Bernarda, enterada de esto y queriendo quitarse a Bosco de en medio, le persuade para que lo monte y Bosco acaba dejándose llevar. Francisca se entera de que Bosco se ha ido a montar a Bicho.

Pedro intenta convencer a Raimundo de que reescriba el manifiesto pues ha conseguido hacer enfadar las autoridades