TRAS TODA LA POLÉMICA
Jota Peleteiro, el marido de Jessica Bueno, ha mostrado su cara de cansancio y desesperación ante toda la polémica que ha surgido en torno a la Primera Comunión del hijo mayor de la modelo y Kiko Rivera.
El pasado fin de semana Jessica Bueno celebraba en su casa de Bilbao, donde actualmente reside junto a su marido, el futbolista Jota Peleteiro y sus dos hijos, la Primera Comunión de su hijo mayor, Francisco, fruto de su relación con Kiko Rivera. Un importante acontecimiento al que el hijo de Isabel Pantoja no dudó en asistir acompañado de su actual mujer, Irene Rosales, y sus dos hijas en común, Ana y Carlota.
Y aunque en un principio, a juzgar por las imágenes que tanto Kiko como Jessica habían compartido a través de sus redes sociales, parecía que todo había transcurrido con total normalidad.
La prima de Kiko, Anabel Pantoja, abría la caja de los truenos mostrando su dolor por no haber estado invitada a este evento. Unas declaraciones a las que Kiko quiso responder señalando a la madre de su hijo como la culpable de que su familia no hubiese estado invitada…
Tras estas informaciones, Jessica Bueno no tardó en salir en su defensa pronunciándose a través de sus redes sociales: "Me parece lamentable que se use un motivo como este para inventar y hacer daño cuando se ha actuado desde el corazón. He organizado una fiesta donde hemos sido los únicos responsables en todos los aspectos, y por respeto y amor hacia mi hijo han estado las personas que creía convenientes y que tienen trato directo con él. Por supuesto no podía faltar su padre, su esposa y sus hermanas. Creo que estoy en mi derecho de poder invitarles solo a ellos, ya que son los principales en la vida de mi hijo", escribió en un Stories de su Instagram.
Desde que todo esto se hizo público, la modelo se ha convertido en uno de los objetivos más perseguidos por la prensa. Después de celebrar la Comunión de su hijo mayor, la ex Miss España se trasladó hasta su casa de Sevilla junto a toda su familia y se ha encerrado en su casa para así evitar a la prensa, y es que recordemos que la modelo necesita mucha tranquilidad ya que se encuentra embarazada de ocho meses.
Y aunque recientemente su madre dedicaba unas palabras a los medios asegurando que Jessica se encuentra bien, quien ha mostrado una cara de agotamiento y desesperación ante todo lo que estaba sucediendo ha sido su marido, Jota Peleteiro.
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