Visita
Xi Jinping visitó La Casa de Colón en una breve escala antes de partir hacia Perú.
Desde hace semanas se viene organizando una visita de menos de 24 horas pero supone la llegada de uno de los mandatarios más relevantes del mundo, el presidente de China, Xi Jinping.
Varios vehículos blindados llevan días esperando en la base militar de Gando la llegada del presidente, también está todo listo en el Hotel Santa Catalina que será su casa por una noche. En este emblemático alojamiento capitalino se ha dispuesto todo al gusto de la comitiva china, desde un 'set' especial para su llegada, hasta los detalles que se han cambiado en la decoración de la habitación destinada al presidente, para darle un aire más orienta. Jinping viaja además de con varias decenas de escoltas, con su propio chef, que estará al cargo de sus comidas en la isla.
Para esta jornada la Policía lleva semanas trabajando el dispositivo de seguridad que convierte la capital en un auténtico búnker, vigilando cada rincón del perímetro del hotel para que no se produzca ningún incidente.
En torno a las 13:30 aterrizaba la primera aeronave procedente de china en el aeropuerto de Gran Canaria, situado en la bahía de Gando, donde también hay una base militar en la que se ha ubicado a este avión. Pero en este primer vuelo no llegaba el presidente, que se encontraba a bordo de otro avión que no mostraba su ruta públicamente en la popular aplicación 'Flight Radar', que se usa para seguir a los aviones desde el móvil.
Eran las 14:24 cuando aterrizaba una segunda aeronave, esta sí, con Jinping a bordo. Se trataba de otro Boeing 747 que también se trasladaba a la zona militar, algo más escondido de los ojos curiosos que el anterior.
Aunque estaba previsto que el presidente del Gobierno de Canarias, Fernando Clavijo, recibiera al mandatario chino a su llegada, finalmente no pudo hacerlo por un retraso en su vuelo desde Tenerife. De esta forma Xi Jinping emprendió directamente su periplo hacia Las Palmas de Gran Canaria, transitando por una autopista que fue cerrada al tráfico ex profeso para él, y su séquito.
La primera parada fue la Casa de Colón, en el barrio de Vegueta, una casona histórica de finales del siglo XVI y que constituye un museo que se centra en el estudio y la difusión de la relación con América. Según se ha podido saber esta era una visita que el presidente quería haber realizado en sus viajes anteriores a las islas, y que no había podido hacer por motivos de agenda. El cronista oficial de la ciudad, Juan José Laforet, fue el encargado de guiarle y enseñarle los detalles del museo.
Por fuera del Hotel Santa Catalina se agolpaban varios cientos de ciudadanos chinos, provistos de sus banderas chinas y españolas, para animar la llegada de su presidente. Esperaban con pancartas que decían en chino: "calurosa bienvenida al tránsito del presidente Xin Jinping a España".
A la llegada de la comitiva, formada por más de 15 vehículos blindados y otros tantos coches de las fuerzas de seguridad españolas, se escucharon vítores y cánticos sincronizados para demostrar el afecto que el pueblo chino residente en Canarias tiene por el presidente Jinping.
Está previsto que la estancia del presidente no se prolongue más de 24 horas y parta para Perú este jueves por la mañana para participar allí en el Foro de Cooperación Económica de Asia Pacífico (APEC).
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