Uriarte consigue ganarse el corazón de Raúl mientras Carmen advierte a su hijo de su gran error

Uriarte ha conseguido su mayor victoria con Raúl, a pesar de todos los esfuerzos de Carmen para abrirle los ojos a su hijo.

Conocer su historia personal ha cambiado su opinión sobre él y, ahora, está dispuesto a darle una oportunidad.

Además, Uriarte le ha dado toda la confianza y el poder que Germán nunca le dio, fortaleciendo así su autoestima.

Dispuesto a dejar el rencor atrás y mirando por el futuro de su bebé, Raúl ha aceptado las acciones de su padre, reafirmando su verdadera identidad.

Carmen, rota de dolor, ha intentado hablar con Raúl para quitarle la venda de los ojos, pero, tras su rechazo, teme lo peor: “Uriarte te está manipulando, Germán y yo te criamos con amor y respeto, cosa que no te va a dar él. Solo tiene rencor y odio contra todo y contra todos”.

Sin duda, Uriarte ha ganado la batalla a Carmen. Su hijo ha aceptado las acciones y, además, está cada día más unido a su padre, pero Carmen no se quedará de brazos cruzados ante esta situación, tal y como se lo ha advertido.