TALIA MENÉNDEZ
Erik Menéndez se casó en 1999 con Tammi, quien ya tenía una hija de un matrimonio anterior pero la joven se ha criado considerando al preso su propio padre.
Lyle y Erik Menéndez llevan 35 años en la cárcel tras matar a sus padres, José y Kitty Menéndez, en agosto de 1989. Eran casi unos niños cuando entraron en prisión y han vivido más tiempo de su vida privados de su libertad que fuera. Aunque esto no les ha impedido que ambos hayan hecho su vida ya que están casados.
Pero después de la serie de Ryan Murphy en Netflix y la presentación de nuevas pruebas que podrían demostrar que sufrieron abuso sexual por parte de su padre la suerte de los hermanos Menéndez podría cambiar. Así, hace unos días el fiscal de distrito de Los Ángeles, George Gascón, recomendó ir a juicio para que se volviera a estimar una nueva sentencia para Lyle y Erik.
En esa conferencia estaba la mujer de Erik Menéndez y su hija, Talia. Ambas han luchado desde hace décadas por su libertad y tras las palabras del fiscal la hija de Erik dijo en Instagram: "Creo firmemente que mi padre merece volver a casa ahora y tengo la esperanza de que el juez esté de acuerdo cuando tome la decisión de una nueva sentencia. Me niego a perder la esperanza".
"Compartir este momento con mi madre y mi familia por el lado paterno fue realmente especial. Pasamos horas hablando, intercambiando historias y fortaleciendo el vínculo que compartimos. Defendemos la libertad de Erik y Lyle, y no podría estar más agradecida por la unidad y el apoyo que tenemos juntos".
Talia no es hija biológica de Erik ya que la joven nació de un matrimonio anterior de su madre. Ella misma se ocupó de explicar su historia y reveló en unos textos en Instagram que su padre falleció cuando ella tenía 10 meses.
Poco tiempo después su madre empezó a tener relación con Erik, al que ya conocía por haber estado mantenido el contacto mediante carta durante años.
Fue con 2 años cueando Talia conoció a Erik por primera vez y desde entonces lo ha sentido como su padre, ya que ha ido constantemente a verlo a prisión.