CUIDADO CON EL CALOR
En verano es más fácil que nos deshidratemos, por eso debemos conocer qué señales manda nuestro cuerpo cuando necesita más agua. En este artículo te las explicamos.
El verano, la estación del sol y el calor, nos invita a disfrutar al aire libre y participar en diversas actividades bajo los cálidos rayos del sol. Sin embargo, mientras nos sumergimos en actividades como pasar el día en la playa, ir a un festival de música o nadar en la piscina, también estamos expuestos a un mayor riesgo de deshidratación. El agua es esencial para el funcionamiento óptimo de nuestro cuerpo, y durante los meses de verano, nuestras necesidades de hidratación aumentan significativamente.
A menudo, ignoramos las señales que nos envía nuestro cuerpo, indicándonos que necesita más agua, y las confundimos con otros malestares. Pero hay que recordar que para que nuestro cuerpo funcione de manera óptima necesita estar hidratado.
El agua es esencial para numerosas funciones corporales, incluyendo la regulación de la temperatura, la lubricación de las articulaciones, el transporte de nutrientes y la eliminación de toxinas a través de la orina.
La deshidratación ocurre cuando nuestro cuerpo pierde más líquidos de los que ingiere, lo que provoca un desequilibrio en los niveles de agua y electrolitos. Reconocer los signos de deshidratación es fundamental para tomar medidas preventivas a tiempo y evitar complicaciones. Algunas señales comunes de deshidratación incluyen:
Afortunadamente, mantenerse adecuadamente hidratado en verano no es una tarea difícil, tan solo hace falta beber suficiente agua, al menos, 8 vasos de agua al día. Sin embargo, si crees que no te estás hidratando correctamente, prueba con estos otros consejos:
En la mayoría de los casos, la deshidratación leve se puede corregir bebiendo más líquidos. Sin embargo, en situaciones más graves, puede ser necesaria atención médica. Busca ayuda médica si experimentas alguno de los siguientes síntomas: