COMO LO OYES
Amantes del café, esto va para vosotros. La nueva moda del verano combina café y tónica para proporcionar una bebida refrescante que se puede disfrutar en casi cualquier momento del día.
La teoría es sencilla: combinar café y tónica. El resultado, además de refrescante, es visualmente espectacular. La tónica y el café tienen una densidad diferente: la tónica se quedará en el fondo del vaso y el café arriba.
Para servir esta bebida, hay que tener en cuenta unos pequeños detalles. El vaso tiene que estar frío, como la tónica. Vierte la tónica en el vaso y mientras tanto prepara el café. Tiene que llenar los dos tercios del vaso.
Ahora vamos con el café, y con la pregunta del millón: ¿qué café?
Las miles de interpretaciones que se pueden dar a esta palabra ([[LINK:INTERNO|||News|||5aa92ef37ed1a85c4bed93d8|||corto, largo, americano, suave, fuerte…]]), se reducen a una palabra: espresso. Será suficiente una tacita de esta bebida al puro estilo italiano. Si lo has hecho bien, tendrá hasta espumita.
Vierte el café desde la cafetera en un vaso de cristal y déjalo enfriar, pero ni se te ocurra añadirle azúcar. Con la ayuda de una cucharita, viértelo en el vaso con la tónica y sírvelo con una pajita.
Esta bebida veraniega, sencilla de preparar, viene hasta con instrucciones a la hora de tomarla. La idea es degustar antes un sorbito de café, y luego beber un sorbito de tónica desde el fondo del vaso con la ayuda de la pajita. Luego mézclalo todo... ¡y a disfrutar!