TRADICIONAL
Cocinar con alcohol no es del todo seguro, es decir, no se elimina completamente al someterlo a altas temperaturas. ¿Qué opciones tenemos? ¿Podemos seguir usando alcohol en los guisos si comen niños?
Has decidido sorprender a la familia con una salsa al vino tinto para acompañar ese guiso que te sale de escándalo. Pones el vino en la sartén, lo dejas reducir, y piensas "perfecto, el alcohol ya se ha evaporado". Pero... ¿y si te digo que eso no es del todo cierto? Pues sí, el alcohol no desaparece por arte de magia en cuanto toca el calor.
Es común escuchar que el alcohol se evapora al cocinar, como si por el simple hecho de exponerlo al fuego desapareciera en un abrir y cerrar de ojos. Pero la realidad es otra. La cantidad de alcohol que queda en una preparación depende de varios factores: el tiempo de cocción, la temperatura, el método de cocción e incluso los ingredientes con los que se mezcla.
La Universidad de Idaho, en colaboración con la Universidad Estatal de Washington y la Universidad de Dakota del Norte, realizó un estudio sobre esto. Y los resultados son reveladores:
Vamos, que si pensabas que con darle un hervor al vino o al licor ya estaba todo solucionado, toca replantearse las cosas.
El alcohol sigue presente en la comida cuando lo usamos en las recetas y, aunque la cantidad pueda parecer pequeña, para ciertos grupos de población puede no serlo tanto. No lo olvides: no hay cantidad segura de alcohol para nadie, pero es que además:
Si te encanta cocinar con vino, coñac o cerveza, pero quieres minimizar la cantidad de alcohol en la receta, aquí van algunos trucos:
Sí, siempre se ha cocinado con alcohol, pero es importante saber que no desaparece tan fácilmente como se cree. Si hay niños, embarazadas o personas con restricciones de alcohol en la casa, conviene replantearse cuándo y cómo usarlo en la cocina. Afortunadamente, hay formas de reducir su presencia y alternativas para conseguir platos igual de deliciosos sin riesgos.
Así que ya lo sabes: la próxima vez que prepares ese guiso con vino, no te fíes solo del calor. Y si tienes dudas, mejor optar por una alternativa segura. ¡Tu salud (y la de los tuyos) lo agradecerá!