SE TRATA DE 'EL CLUB DE LA RESACA'
Zumos de frutas, comida alta en grasas, sofás, televisión, música 'new age' e incluso goteros ofrece el autobús de 'El club de la resaca', una especie de spa sobre ruedas instalado en Manhattan para atender a los neoyorquinos más resacosos tras la fiesta de Fin de Año.
Desde las 11 de la mañana hora local a las 7 de la noche este autobús abre sus puertas en la calle 21, en el barrio neoyorquino de Chelsea, uno de los de más actividad nocturna, y está preparado para atender a 200 personas.
Este servicio de 'El club de la resaca' -organización que se creó hace tres meses- ha contado con reservas de hasta 75 previsores juerguistas y ofrece varios modelos de "tratamiento". Además del menú de líquidos con vitaminas, zumos, hamburguesas y un hilo musical con música de Enya y otros artistas 'new age', el paquete más básico, de 40 minutos, incluye hidratación y medicación para las náuseas o el dolor de cabeza por 129 dólares.
Por 149 dólares se añade al paquete una inyección de vitamina B y, para los más afectados, existe es servicio "mega" que incluye, por 20 dólares más, una dosis desintoxicante y otra de vitamina C.
Todas las inyecciones se ofrecen también por separado y, para los que no quieran gastar tanto dinero, hay un kit antirresaca "para llevar" a partir de 79 dólares. 'El club de la resaca' ha inaugurado este servicio de autobús-spa con precios de oferta de lanzamiento, pero lleva tres meses ofreciéndolo a domicilio con el eslogan de "el alivio más rápido para la resaca. Y punto".