Mensaje de Navidad del Rey
Sexto mensaje de Navidad del rey y segundo que le toca hacerlo con un gobierno en funciones. Lo ha recordado para señalar que "corresponde al Congreso, de acuerdo con nuestra Constitución, tomar la decisión que considere más conveniente para el interés general de todos los españoles". En cuatro ocasiones habla directamente de la Constitución. No solo por el proceso derivado de las últimas elecciones, sino también porque "vivimos en un Estado Social y Democrático de Derecho que asegura nuestra convivenciaen libertad". Y porque gracias a ella, "hemos compartido a lo largo de los años unos mismos valores sobre los que fundamentar nuestra convivencia". Entre ellos destaca la concordia y la voluntad de entendimiento y de integrar nuestras diferencias, gracias a la responsabilidad, generosidad, diálogo y respeto entre personas de ideologías diferentes. Estos valores, dice el rey, que "no podemos darlos por supuestos ni tampoco olvidar su fragilidad".
No caer en los extremos ni la autocomplacencia
Felipe VI dice que "no debemos caer en los extremos", ni en la autocomplacencia, ni en la autocrítica destructiva. Lo hace tras resaltar la necesidad de confiar en nosotros mismos, de que "pensemos a lo grande", apoyando al reflexión en que hasta ahora se ha sabido hacer frente a todas las dificultades.
Deterioro de la confianza en las instituciones
La llamada a la confianza es porque "el mundo no vive tiempos fáciles", con incertidumbre y cambios profundos, traídos por la nueva era digital, el rumbo de la Unión Europea, la migración, la desigualdad laboral entre hombres y mujeres o el cambio climático. A lo que ha añadido la falta de empleo y las dificultades de muchas familias: "la crisis económica ha agudizado los niveles de desigualdad". Además, en España tenemos dos preocupaciones más: "el deterioro de la confianza de muchos ciudadanos en las instituciones, y desde luego Cataluña".
Su mensaje inicial ha sido para los afectados por las riadas y las inundaciones. Y antes de despedirse ha recordado a los que están trabajando al servicio de todos en estas fechas de reuniones familiares.
Segundo mensaje de Navidad con un gobierno en funciones
En 2015, Felipe VI ya vivió una situación parecida, cuando el PP de Mariano Rajoy cosechó una victoria insuficiente que abrió la puerta a la inestabilidad legislativa de los últimos años. Entonces, el Rey apeló al “diálogo”.
La situación política, en especial la catalana, ha estado presente en las alocuciones navideñas del jefe del Estado a los españoles. De hecho, en su mensaje de 2018, Felipe VI exigió que "las reglas que son de todos sean respetadas por todos". Además, sin hablar expresamente de Cataluña, revindicó la vigencia de la Constitución frente al desafío independentista.
En 2017, el Rey apeló a la unidad frente al terrorismo tras los atentados de ese verano en Barcelona y Cambrils, y en la Nochebuena anterior se centró en el “entendimiento” político y la situación de vulnerabilidad que afecta a miles de españoles.
Felipe VI también se acordó en su primer discurso de 2014 de quienes peor lo pasan. Además de subrayar como “ejemplo de seriedad” de España el proceso de abdicación de la Corona por parte de Juan Carlos I, Felipe VI criticó las “inaceptables” cifras de paro.
En sus cinco primeros discursos, el Rey también ha tenido palabras para denunciar la lacra de la violencia machista y para revindicar que la sociedad está “en deuda” con los jóvenes, precisamente uno de los colectivos más afectados por el paro y más “comprometidos” por causas como el cambio climático, tema que ha marcado la agenda española tras la reciente celebración en Madrid de la COP25.