en un comunicado
ETA ha dado por concluida su "ciclo histórico y su función", aunque ha anunciado que sus exmilitantes "seguirán en su lucha por Euskal Herria unificada e independiente". Además, afirma que, de esta forma, "cierra un ciclo en el conflicto que enfrenta a Euskal Herria con los Estados, el caracterizado por la utilización de la violencia política".
La disolución de ETA, que la banda terrorista está escenificando por capítulos en los últimos días, supone el fin de la última de las grandes bandas terroristas europeas que, mucho antes del yihadismo, sembraron el terror, especialmente en los años setenta y ochenta.
"ETA ha desmantelado totalmente el conjunto de sus estructuras y da por concluida toda su actividad política"
En el comunicado, que se ha dado a conocer en la sede de la fundación de diálogo humanitario Henry Dunant, en Ginebra, donde se encuentran agentes internacionales que han visionado el vídeo de disolución de ETA, en el que el histórico dirigente de la banda, José Antonio Urrutikoetxea, 'Josu Ternera', aparece a cara descubierta leyendo un comunicado de tres minutos. "ETA ha desmantelado totalmente el conjunto de sus estructuras. ETA da por concluida toda su actividad política. No será más un agente que manifieste posiciones políticas, promueva iniciativas o interpele a otros actores. Los exmilitantes de ETA continuarán con la lucha por una Euskal Herria reunificada, independiente, socialista, euskaldun y no patriarcal en otros ámbitos, cada cual donde lo considere más oportuno", añade.
En este sentido, asegura que "desea cerrar un ciclo en el conflicto que enfrenta a Euskal Herria con los Estados, el caracterizado por la utilización de la violencia política". Según apunta, ha tomado "esta decisión histórica, para que el proceso en favor de la libertad y la paz continúe por otro camino". "Es la secuencia lógica tras la decisión adoptada en 2011 de abandonar definitivamente la lucha armada", añade.
ETA, fundada en 1959, está anunciando su final casi sesenta años después, habiendo dejado en el camino 7.265 víctimas, entre ellas 864 muertos, según los datos oficiales; sin apenas capacidad operativa -solo media docena de liberados- y cerca de 300 presos. A lo largo de su historia, los terroristas han declarado trece alto el fuego o treguas parciales hasta llegar al "cese definitivo de su actividad armada" el 20 de octubre de 2011, hace seis años y medio.