SEMANA EUROPEA DE LA ROBÓTICA EN MADRID
En pantalla el cine lo intenta desde hace un siglo; una y otra vez nos presentan el robot del futuro, el definitivo, pero ahora, en pleno 2012, el perfil que nos dibujaron no termina por encajar. O el robot en cuestión es demasiado realista, véase el protagonista de Prometheus, o demasiado bueno para el cine, como el Wall-E de Disney. Hoy por hoy, de momento, el más moderno tiene algo de trabajo; concretamente, en Marte. A donde el hombre no llega, el Curiosity sí.
Pero si hablamos de tecnología robótica, simplemente de cuán modernos son los últimos inventos, la distancia que separa a España de otros países se acorta. Probamos lo último modelo, precisamente, sobre tierra roja en Madrid. La robótica moderna también lleva firma española.
Gwam, 120 kilos. Avatar One, recorre tres metros por segundo. Uno de Valencia, otro de Madrid. Son dos ejemplos. Pero las nuevas generaciones también encuentran su hueco en la Semana Europea de la Robótica. Cientos de jóvenes estudiantes diseñan sus propias invenciones, con el objetivo de conseguir la mayor puntuación, dentro de la competición de piezas que cada año organiza la firma Lego.