CAOS ACUÁTICO EN HUNGARORING

Rosberg logra la pole en Hungría con Sainz sexto y Alonso séptimo

Entre la lluvia y las banderas rojas, Nico Rosberg conquistó la pole del GP de Hungría por delante de Hamilton y de Ricciardo. Los españoles tuvieron una gran actuación con Sainz sexto y Alonso séptimo, con el único borrón de un trompo de Fernando que le impidió estar incluso más arriba con un competitivo McLaren-Honda.

Hungría y lluvia es igual a emoción. A que todo puede pasar. A que una sesión de clasificación de 60 minutos se vaya a las dos horas por el agua y por las múltiples salidas de pista y banderas rojas por el húmedo asfalto. Entre el caos, Nico Rosberg puso el orden y logró la pole en una muy buena sesión para Carlos Sainz y para Fernando Alonso, que obtuvieron el sexto y el séptimo mejor registro de la jornada.

Y mejor que podría haber sido en el caso del asturiano, pues solo un trompo en la Q3, en su última vuelta de Q3, hizo que McLaren-Honda no tuviera más que festejar tras la sesión de sábado en Hungaroring. Tienen ya algo celebrar eso sí, pues tanto Jenson Button como Fernando se han mostradon cien por cien competitivos en todas las condiciones de pista durante el fin de semana. En condición cambiante, incluso más si cabe.

En Q2, mismamente, Alonso no paraba de mejorar con cada vuelta que daba aprovechando toda zona seca de la trazada con sus gomas rojas superblandas. Ni Ferrari ni casi nadie podía con él, y por imposible que pueda parecer vivió relativamente relajado el final de una ronda clasificatoria que hasta hace poco o no pisaba o pisaba sufriendo. O lo hacía porque A, B o C se habían quedado fuera. En esta ocasión, a pesar de que el clima vino bien, dio sensación de que fue por méritos propios. Dio sensación el McLaren-Honda de fuerza y sobriedad.

No tanta eso sí como el Mercedes, que parece que siempre que lo necesita tienen ese 'botón mágico' que pulsar para tener más y más poder. Un poder que parece no tener fin. Uno que de nuevo les lleva a la primera línea de la parrilla y que dejó a Rosberg como campeón de las dos flechas de plata. Lo fue, curiosamente, por el trompo de Alonso, pues cogió de pleno a Hamilton en su última vuelta cuando iba pulverizando cronos. Eso, y su pilotaje obviamente, le dieron a Nico una pole que rompe la racha de Lewis en las jornadas de sábado.

Tampoco tuvieron demasiados rivales. Quizá los Red Bull, aunque Verstappen no pudo pasar por la meta antes de la bandera a cuadros para un último intento. Ni tampoco los Ferrari, erráticos e irregulares. Muy apretada estuvo gracias a sus problemas la zona media, con Force India, Williams e incluso Toro Rosso gracias a Carlos Sainz. Nadie hubiera podido pensar en una Q3 del madrileño, pero no sólo logró llegar a ella sino que fue sexto.

Ahora queda por ver qué pasara cuando se repartan los puntos, y si la cosa está tan movida como en clasificación podemos prever una carrera interesante, larga y con muchas variantes. Los puntos son una opción más que real para los españoles y soñar sigue siendo algo total y absolutamente gratuito. Por arriba, en donde viven Hamilton y Rosberg, el mano a mano está servido y garantizato.

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