¡A patadas!

Una orquesta con globos: Marron sorprende a Malú con un insólito experimento musical en El Hormiguero

La presión con la que sale el aire por la boquilla provoca que se emita el zumbido y que el globo salga propulsado.

Los globos sonoros funcionan gracias a un principio básico de la física: la acción y reacción, el mismo que usan los cohetes reales.

Cuando inflas el globo y lo sueltas sin atarlo, el aire sale disparado hacia atrás y empuja el globo hacia adelante. La forma alargada del globo y el diseño especial de su boquilla ayudan a que el aire salga de manera más eficiente, permitiendo que el globo vuele más recto y rápido. Además, esa misma boquilla hace que el aire al escapar produzca un zumbido o silbido divertido, añadiendo un efecto sonoro mientras se desplaza.

Cuanto más inflado esté el globo, más aire sale y mayor es el empuje, por lo que vuela más rápido y produce un zumbido más fuerte. Además, la dirección en que lo sueltas puede hacer que vaya más recto o se desvíe, mostrando cómo la física del movimiento y la presión interactúan con la forma y el diseño del globo.

Es un ejemplo muy visual y entretenido de cómo la presión del aire se convierte en movimiento y sonido al mismo tiempo.