LA PRIMERA VISITA

Recomendaciones de una matrona cuando vas a visitar a un recién nacido

En los grupos de preparación al parto, una de las cosas que más preocupa a las futuras madres sobre el posparto, son las visitas: el no poder decir que no, el sentirse juzgadas o las opiniones no pedidas.

Una madre con su bebé recién nacidoFreepik

Cuando un bebé llega a tu círculo social o familiar, todo el mundo está deseando conocerlo, pero, sin embargo, los nuevos padres y el bebé recién nacido necesitan intimidad y tiempo para adaptarse a su nueva vida antes de recibir visitas.

Por eso, cuando vamos a visitar a una mujer que acaba de parir, no debemos olvidarnos de que estamos visitando a una mujer que acaba de pasar por uno de los momentos más decisivos de su vida y tanto ella como el bebé están en un momento de gran vulnerabilidad.

¿Hace falta visitar al bebé al hospital?

Nuestra cultura nos impulsa a visitar a la madre y al recién nacido para así mostrar nuestro interés. ¡A veces incluso en el mismo hospital! Pero las familias necesitan todo lo contrario, y estas visitas son sólo una causa de estrés en un momento de cambios que ya por si mismo puede ser arrollador y desbordante para la nueva familia.

Recién nacido | Pexels

Recomendaciones si vas a visitar a una madre recién parida:

Si tu amiga o tu familiar ha tenido un bebé, quiero que tengas en cuenta las siguientes recomendaciones:

  • Nunca te presentes sin avisar: Tampoco preguntes, ya que todas sabemos que puedes recibir un "sí" por compromiso. Respeta su tiempo, muéstrale tu interés por conocer al nuevo bebé, y espera a que sea ella quien decida cuándo es el momento.
  • Haz que tu visita sea un apoyo para ella: Puedes llevarle comida preparada, pasar por el supermercado, cuidar de los hijos más mayores o hacerle alguna tarea doméstica o de gestión, si lo necesita.
  • No estés mucho tiempo, haz que la visita sea corta: La nueva familia te está regalando un tiempo que quizá no tiene para compartir contigo ese momento tan especial.
  • No juzgues u opines sobre su lactancia, su crianza, su parto: Sólo escucha, y permítele desahogarse. Si está teniendo problemas con la lactancia o el posparto en general, puedes ofrecerte para ayudarle a buscar ayuda de un profesional.
Una mujer da el pecho a su bebé | Pexels
  • No uses perfumes o cremas con olores si vas a visitar a un bebé: Los olores fuertes van a interferir en su vínculo con la madre. Los recién nacidos tienen el sentido del olfato muy desarrollado, y necesitan el olor de mamá.

  • No cojas al recién nacido a no ser que sea la madre quien te lo ofrezca: El bebé necesita estar con su madre para sentirse protegido y para establecer un vínculo. Tú estás deseando cogerle, pero seamos realistas… el bebé no quiere tus brazos, sólo quiere estar pegado a mamá. Ir de mano en mano con todas las visitas es una causa de estrés en el bebé ¡y también una falta de respeto!
  • No vayas a visitarles si tienes algún síntoma de resfriado por leve que sea: Una infección respiratoria superficial en el adulto que pasa desapercibida puede ser causa de una bronquiolitis grave en el bebé.

Y además de todas estas recomendaciones, siempre es imprescindible lavarse las manos. Esto siempre.