DILEMA CAPILAR
La doctora Claudia Bernárdez, dermatóloga y tricóloga, ha respondido en su Instagram a una de las preguntas más frecuentes en verano: ¿podemos rapar a un bebé? La experta explica los falsos mitos por los que se suele hacer y expone los motivos por los que no deberíamos.
Cuando se trata de cuidar a un bebé, hay una serie de decisiones que los padres deben tomar que parecen intrascendentes, pero no lo son tanto. Una cuestión que a menudo surge es si se debe rapar su cabello.
Algunas culturas promueven la idea de afeitar la cabeza de un bebé para "purificarlos", como la hindú, mientras que otras pueden considerarlo innecesario o incluso perjudicial. Y aunque en tu familia no creáis en este tipo de tradiciones, es probable que ahora que la temporada de calor está a la vuelta de la esquina os hayáis planteado someter a vuestro peque a su primer cambio de look, pero, ¿debéis?
La doctora Claudia Bernárdez, dermatóloga y tricóloga, ha respondido a este dilema tan común en su cuenta de Instagram dedicada a la difusión de información médica.
La experta es muy clara con su respuesta: no debemos rapar a los bebés. ¿Por qué? Porque el pelo no solo cumple una función estética en nuestro cuerpo, también
protege del sol a nuestros pequeños y evita que pierdan calor. "Los bebés tienen una cabeza enorme que pierde muchísimo calor", asegura.
Para Bernárdez, por más que llevemos a los pequeños tapados con gorritos, la función del pelo es indispensable para protegerlos de los rayos dañinos del sol -cabe recordar que los daños causador por la exposición solar en los primeros 20 años de vida son los más importantes-.
Además, la doctora recuerda que cortarles el pelo "no va a hacer que el pelo crezca más fuerte, ni más rápido, ni todas esas cosas que siempre se ha dicho". Frase con la que intenta disuadir a aquellos padres convencidos de rapar a su bebé este verano.
Aun así, para aquellas familias a las que les llegue tarde el aviso, Bernárdez envía un mensaje de calma: "No os preocupéis si lo habéis hecho, el pelo crece".
Algunos padres optan por afeitar el cabello de su bebé por razones de higiene y comodidad. El cabello de un recién nacido puede ser delgado y difícil de manejar, y muchos bebés tienen una tendencia a desarrollar costra láctea en el cuero cabelludo, que es una acumulación de piel muerta y aceite. Afeitar el cabello podría facilitar la limpieza y reducir la presencia de costra láctea.
Sin embargo, es importante destacar que existen otras formas de tratar y prevenir la costra láctea, como el lavado suave y regular del cuero cabelludo del bebé con champú suave y la utilización de cepillos suaves para el cabello.
Otro miedo que tienen algunos padres es que a su hijo les caiga el pelo de la zona posterior de la cabeza por pasar demasiado tiempo tumbados boca arriba. Y esto es totalmente falso. Según indica la experta, simplemente es la zona de pelo que se ha creado primero dentro del útero y es el primero en recambiarse. Por este mismo motivo también hay zonas en los que tienen el pelo mucho más largo que en otras.