TIPS DE LIMPIEZA
Es recomendable realizar esta labor al menos dos veces al año para evitar la acumulación de moho, cal y otras sustancias que podrían dañar las piezas de su interior.
Cuando limpiamos nuestro hogar, hay algunos detalles que se nos olvidan por completo limpiarlos. Igual que ocurre con los pomos, mirillas y otros herrajes, la cisterna del inodoro es otra parte que no solemos tener muy en cuenta a la hora de desinfectar el cuarto de baño, y en realidad, es importante hacerlo.
El inodoro es una zona donde hay que extremar la higiene, ya que es una fuente inagotable de bacterias. Además, en la cisterna se puede acumular mucha cal debido al agua estancada e incluso provocar desbordamientos si descuidamos su mantenimiento.
Para evitar que se desprendan malos olores y evitar la acumulación de cal, te vamos a contar cómo debes limpiar tu cisterna y cada cuánto tiempo tienes que hacerlo. En el vídeo podrás verlo con más claridad.
¿Cada cuánto tiempo debes limpiar la cisterna?
Lo ideal sería que realizaras una limpieza profunda de la cisterna, al menos, dos veces al año. De esta forma, podrás evitar el moho, la cal y otras sustancias que podrían dañar las piezas de su interior.
Si no la limpiamos nunca, el paso del tiempo podría provocar olores desagradables en el aseo y, además, los componentes podrían oxidarse y dejar de funcionar correctamente como consecuencia.
¿Cómo hay que limpiar la cisterna del inodoro?
Para limpiar la cisterna del inodoro, necesitarás materiales como guantes de goma, un cepillo con mango largo o un cepillo de dientes viejo y una esponja. En cuanto a productos, utiliza vinagre blanco y zumo de limón.
Una vez que tengas todo listo, empieza desenroscando el botón de descarga de agua cuidadosamente y, a continuación, retira la tapa y déjala en el suelo encima de una toalla para evitar que se estropee.
Por un lado, el vinagre blanco es un potente desinfectante natural que es capaz de eliminar el moho y la cal más difícil de combatir. Sin llegar a drenar el agua del interior de la cisterna, vierte media botella de vinagre blanco y media taza de zumo de limón.
Ahora solo espera a que actúe durante al menos 30 minutos y, pasado este tiempo, frota la suciedad de las piezas con el cepillo de dientes. Empezarás a notar que la acumulación de moho y cal sale con mucha facilidad.
Una vez hecho esto, con la esponja, frota en las paredes del inodoro sobre las zonas que se vean más sucias. Por último, descarga el inodoro un par de veces y así eliminarás la solución de vinagre y limón del tanque.
Si notas que las paredes aún siguen sucias, puedes repetir el proceso hasta que queden completamente limpias.
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