DORMIR BIEN
¿Alguna vez te has preguntado por qué hay personas que sacan un pie fuera de la cama antes de dormir? Descubre por qué este gesto común es más que una manía, ya que la ciencia lo vincula a la termorregulación corporal y al sueño reparador.
Pocas personas podrían afirmar no haber visto esta situación nocturna tan común: alguien (o tú mismo) se mete en la cama, listo para descansar, pero, tras varios minutos tratando de conciliar el sueño, de manera casi instintiva, desliza uno o dos pies fuera de las sábanas y se duerme al instante. Este comportamiento cotidiano, aparentemente trivial, es objeto de un profundo interés científico. ¿Por qué dejar escapar los pies fuera de la cama suele ayudar a sentir mayor comodidad? Numerosos estudios han explorado el papel de los pies en la termorregulación del cuerpo humano.
Para entender el porqué de este fenómeno es imprescindible tener en cuenta que conciliar el sueño implica enfriar el cuerpo, especialmente en climas o épocas cálidas. Además, es relevante subrayar que, a diferencia de los animales de sangre fría, como reptiles o insectos, los mamíferos dependemos de fuentes externas de calor o frío para regular nuestra temperatura corporal. Esto implica que somos capaces de mantener la temperatura constante en función del entorno que nos rodea. Si hace demasiado calor, el cuerpo evita que nos sobrecalentemos mediante el sudor. Si hace frío, nos ponemos a temblar para generar energía y nuestros vasos sanguíneos se contraen para retener el calor al máximo.
Es por eso que varias investigaciones publicadas en la revista Aviation, Space and Environmental Medicine destacan que enfriar las manos y/o los pies es una de las formas más eficaces de reducir la temperatura corporal. Al taparnos, la temperatura del cuerpo tiende a aumentar, activando los termorreceptores de los pies, como los corpúsculos de Ruffini (detectores de calor) y los corpúsculos de Krause (detectores de frío). Como respuesta, los pies se asoman inconscientemente de la manta para regular nuestra temperatura corporal.
Entonces, ¿qué ocurre cuando dormimos? Durante el descanso nocturno, el cuerpo disminuye la temperatura interna de nuestros órganos, disipando el calor hacia afuera mediante la vasodilatación. Al abrir los capilares sanguíneos en la piel, las manos y los pies, el cuerpo se prepara para el sueño. Sacar un pie de la cama ayuda a reducir la temperatura corporal, favoreciendo un sueño más tranquilo y placentero.
El uso de calcetines juega un papel esencial en este proceso. Esta prenda ayuda a calentar los pies, contribuyendo así a enfriar el resto del cuerpo, según confirma la Sleep Foundation. Estudios indican que utilizar calcetines durante el sueño mejora la calidad del mismo al acelerar el inicio del sueño y mantener la relajación del cuerpo sin perturbar las funciones esenciales del núcleo homeotérmico.
Un estudio de 2018 de Yelin Ko y Joo-Young Lee, graduados en Ecología Humana en la Universidad Nacional de Seúl, respalda científicamente la eficacia de este acto instintivo al demostrar que calentar los pies con calcetines durante el sueño modula las propiedades de activación de las neuronas activas, reduce el flujo sanguíneo cerebral y distribuye uniformemente el calor por todo el cuerpo.