TRUCO CASERO
Aunque quizá sea una de los objetos que más olvidados tenemos en el baño a la hora de limpiarlo, de vez en cuando también habría que desinfectar las esponjas que utilizamos para lavarnos y así prolongar su vida útil.
El uso de las esponjas forma parte de nuestro día a día, sobre todo porque están en contacto con partes de nuestro cuerpo, por lo que es importante mantenerlas higiénicas y libres de gérmenes.
Aunque parezcan que estas están limpias porque están en contacto con agua y jabón, lo cierto es que al final son las encargadas de eliminar la suciedad y resto de piel muerta de nuestros cuerpos, por lo que de vez en cuando es interesante realizar este proceso para desinfectarlas si no quieres desecharlas pronto.
Para desinfectarlas correctamente tan solo tendrás que mezclar en un recipiente agua tibia y vinagre a partes iguales. A continuación, sumerge la esponja para que se empape bien de la mezcla y deja que esta actúe más o menos unos 10 minutos. Después habrá que sacarla y escurrirla bien.
El siguiente paso para higienizar nuestra esponja será usar un poco de lejía, al igual que con el vinagre introdúcela en un recipiente con agua, y esta vez solo con un poco de lejía tan solo unos 5 minutos.
El último paso será aclararla con abundante agua y añadirle un poco de jabón para eliminar los restos de lejía que pudieran quedar. Con esto nuestra esponja habrá quedado totalmente desinfectada.