FACILITA LA COMUNICACIÓN
El Baby Sign es un método que cada vez está cogiendo más popularidad y es ideal para la comunicación con los bebés que no hablan. En este artículo, vamos a ver qué es exactamente y cuáles son los beneficios que aporta, tanto para los niños como para los adultos.
Si tienes un hijo pequeño, seguro que has pasado por momentos en los que resulta complicado entender qué está pidiendo o necesitando. Al no poder hablar, los bebés utilizan otros métodos para comunicarse, como los balbuceos y los lloros, que a menudo cuestan de descifrar. Es normal que como padre o madre, y más si sois primerizos, al principio sientas frustración o impotencia por no saber interpretar lo que intenta decir tu hijo.
Sin embargo, con el tiempo, práctica y tras un proceso de observación, dudas y errores podrás saber identificar el significado de cada señal, reconociendo si tiene hambre, sed o sueño. Asimismo, existen otras herramientas que facilitan la comunicación y fomentan un vínculo más estrecho entre padres e hijos. Este es el caso del Baby Sign, un lenguaje de signos para comunicarse con los bebés y que se está haciendo cada vez más popular (también hay famosos que ya lo practican con sus hijos como, por ejemplo, Quim Guitérrez, tal y como él mismo comentó recientemente en una entrevista en televisión).
El Baby Sign es un lenguaje que se enseña a los bebés antes de que hablen y que consiste en usar signos con las manos para designar las palabras y conceptos que más se utilizan, como "tengo hambre", "tengo sed", "biberón", "dormir", "jugar", etc. Esto permite al niño participar en el proceso de comunicación y fortalece su comprensión del lenguaje y estimula su desarrollo intelectual.
Una de las dudas que puede generar este método es que se retrase el momento en el que el niño empiece a hablar. Esto la ciencia lo ha descartado y hay estudios en los que se detallan los beneficios del Baby Sign cuando los bebés son mayores. Así, Mariona Sentís Arqués, en su trabajo 'Alternativas a la comunicación ordinaria, menciona los resultados de la investigación de Linda Acredolo y Susan Goodwyn, hecha en Estados Unidos:
Además, el Baby Sign logra que los bebés tengan más autonomía, reduce la frustración y las rabietas porque se atienden más rápidamente y de forma más efectiva sus demandas, se refuerza el vínculo afectivo con sus familiares, y facilita el aprendizaje de idiomas.
En este último caso, Andrea Beitia Cobo, de la cuenta oficial de Baby Sign España (@babysignspain en Instagram), explica que el signo no cambia, es el mismo en cualquier idioma, solamente hay que decir las palabras en las diferentes lenguas. De esta manera "el peque o la peque, a través del signo, entiende que las tres palabras son sinónimas". En el vídeo, pone como ejemplo decir en castellano, inglés y francés palabras como perro, árbol o rojo, entre otras.
Enseñar el Baby Sign a tu bebé no es complicado, solo hace falta paciencia y constancia. Se puede hacer a partir de los 6 meses, más o menos, y no hay un tiempo exacto en el que el pequeño empiece a usarlo, ya que cada uno tiene su ritmo.