MUY SALUDABLES
Descubre cuáles son las mejores sardinas en lata según la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) y por qué deberías incluirlas en tu despensa. Sus expertos han evaluado 19 marcas para ayudarte a elegir la mejor opción.
Después de un largo día en la oficina, lo último que te apetece al llegar a casa es ponerte a cocinar, por lo que acabas optando por preparar algo rápido. Una opción saludable y deliciosa son las sardinas en lata, nutritivas, versátiles y fáciles de almacenar en la despensa durante mucho tiempo. Pero, ¿cómo saber cuáles son las mejores? La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha hecho el trabajo duro por ti y ha evaluado varias marcas para ayudarte a tomar la mejor decisión.
La OCU ha comparado 19 latas de sardinas en aceite de oliva, incluyendo tanto marcas reconocidas como marcas blancas. El objetivo era verificar que el aceite utilizado fuera realmente de oliva y que la cantidad de sardinas cumpliera con los estándares mínimos requeridos. Además, un panel de expertos ha examinado aspectos como el olor, sabor, textura y presentación de las sardinas.
De acuerdo con los resultados de su exhaustivo examen, hay tres marcas que destacan por su excelente relación calidad-precio. Curiosamente, todas ellas son marcas blancas que cuestan menos de 9 euros el kilo:
1. Auchan (Alcampo): Con una calificación de 67 sobre 100, cada lata de 120 gramos cuesta 1 euro. Aunque algunas piezas presentan desgarros, su calidad general es muy buena.
2. Hacendado (Mercadona): Esta marca obtuvo una calificación de 65 sobre 100, con un precio de 1,90 euros por un pack de dos latas de 117 gramos. Ofrece una buena calidad, aunque podría mejorar en el contenido de sal y el etiquetado.
3. Nixe (Lidl): Con una calificación de 64 sobre 100, el precio es de 1,89 euros por un pack de dos latas de 125 gramos. Su relación calidad-precio es excelente, siendo las más baratas del estudio, aunque deberían reducir su contenido de sal.
El análisis también incluyó la verificación de la frescura de las sardinas a través de la detección de histamina. Afortunadamente, todas las muestras pasaron la prueba, indicando una buena calidad de la materia prima. Además, las sardinas, al ser un pescado pequeño, no acumulan metales pesados como el atún. Los análisis mostraron niveles muy bajos de cadmio y ausencia de mercurio, lo que las hace una opción segura para nuestra alimentación.
Un aspecto negativo de este básico de la despensa es la presentación, que no siempre es perfecta. En 13 de las 19 latas analizadas, las piezas presentaban roturas y desgarros, además de tamaños dispares, lo cual afectó la valoración final.
Las sardinas son reconocidas por sus beneficios nutricionales. Son ricas en ácidos grasos omega-3, yodo, fósforo y proteínas de alto valor biológico. Según la OCU, todas las marcas analizadas utilizan aceite de oliva 100%, lo que añade un valor extra a su perfil nutricional.
Sin embargo, su alto contenido en grasa, cercano al 15%, debe ser considerado por quienes necesitan controlar su peso. Además, aunque el contenido en sal es alto, no es exagerado en la mayoría de las marcas.