HA SIDO MODIFICADA GENÉTICAMENTE PARA QUE NO SE ENNEGREZCA
¿Te da cierto repelús que las manzanas se pongan negras en contacto con el oxígeno? ¿Comerías más manzanas si no fuese porque ese colorcillo te pone los pelos de punta? Tu sufrimiento va a acabar gracias a la gente de Okanagan Specialty Frutis, una compañía canadiense que está trabajando una manzana modificada genéticamente para que no se oxide en ningún momento, que llegará a las tiendas en 2016.
Cuando uno se enfrenta a noticias como la de la existencia de unas manzanas transgénicas que van a ver la luz en los comercios en 2016 y, al parecer, jamás van a oscurecer en contacto con el oxígeno gracias a la modificación genética, no puede evitar preguntarse si esto es el progreso o lo que estamos haciendo en realidad es ir hacia atrás. Las manzanas transgénicas van a llegar al mercado de la mano de la compañía Okanagan Specialty Frutis, que tiene previsto lanzar dos variedades, la Arctic Granny y la Arctic Golden.
Lo que en principio nos puede parecer una frivolidad no lo es tanto si uno atiende a los motivos que dan sus responsables para modificar genéticamente una manzana con el objetivo de que no se oxide: evitar el desperdicio de alimentos, ya que en Canadá se tiran a diario grandes cantidades de comida. Y todo ello, mediante una técnica denominada 'Interferencia de ARN’, que consiste en bloquear la enzima responsable del proceso de oxidación de la fruta.
Pese a que hay quien aplaude esta iniciativa, diversos sectores se han llevado las manos a la cabeza ante la posibilidad de introducir en el mercado un producto que va a alterar el panorama mucho más de lo que pueda parecer a priori. Diversas ONGs y la industria de la manzana al completo aseguran no sólo que la aparición de esta especie va a hundir el sector, sino que además puede producir la contaminación y la alteración genética de otras plantaciones de manzanos, generando un impacto en el producto (y en sus consumidores).
Por su parte, desde la compañía responsable de la comercialización de estas manzanas, cuyo lanzamiento está aprobado para 2016 por las autoridades estadounidenses, se escudan en argumentos como la posibilidad de cortar rodajas de manzana en reuniones o pícnics, algo que hasta el momento no puede hacerse porque su aspecto empeora enseguida.
Los defensores de Arctic aseguran, además, que en el caso de otras especies transgénicas como el maíz se introducen genes de otras especies, mientras que en el caso de estas manzanas simplemente se altera muy levemente la genética del producto para evitar su oxidación, de manera que el proceso no es comparable al de otros transgénicos que a priori suponen una mayor manipulación del producto inicial.