Hay tratamientos perfectos para realizar en épocas concretas del año. Ahora, toca preparar la piel para el verano y empezar a lucir desde ya una piel radiante como el sol.
Por qué debes ir al dermatólogo
Realizar una visita de dermatología para una rutina cosmética especializada es esencial. Es un paso fundamental, ya que en una consulta con tu dermatóloga de confianza se podrá diagnosticar si sufres de algún problema de la piel o diferenciar el tipo de manchas que tienes.
Por otro lado, si tienes una piel sana también es relevante esta visita ya que se puede instaurar una rutina cosmética personalizada según tu edad, tipo de piel, necesidades y objetivos para prevenir los signos del foto-envejecimiento precoz y mantener una piel saludable.
Cómo lucir una piel radiante
Además de la visita a dermatologúa, puedes seguir los siguientes consejos:
- Introducir cosméticos con principios activos antioxidantes como la vitamina C y E y el ácido ferúlico en tu rutina diaria.
- Aplicar fotoprotección de amplio espectro cada día.
- Valorar suplementos orales que favorecen la protección solar.
- Realizar una sesión de luz pulsada intensa facial al inicio de la primavera. Es un tratamiento ideal para tratar los signos del fotoenvejecimiento y evitar que progresen. Si realizas este tipo de tratamiento de forma precoz evitarás que se acumule pigmento en tu piel y que en un futuro sea más difícil de tratar. Así mismo la luz pulsada favorece la formación de colágeno lo que se traduce una piel más luminosa.
- Tratar el melasma. En ocasiones se tiende a pensar que es mejor dejar el tratamiento de las manchas faciales para después del verano, este error frecuente puede contribuir a que tu melasma cada año sea más difícil de tratar. Es fundamental instaurar un tratamiento médico y cosmético para tratar el melasma adaptado a la primavera y la exposición solar del verano. Así mismo se pueden realizar tratamientos en la consulta que potencien los resultados como el láser fraccionado no ablativo, el láser de picosegundo, la radiofrecuencia con microagujas y el "dermopen".
- Peelings químicos con ácido salicílico o glicólico nos permiten renovar las capas superficiales de la piel, aportando luminosidad, ya que eliminan células muertas, pigmento, estimulan la renovación celular y regulan la función sebácea. Ideal para realizar antes de que se intensifique la exposición solar durante el verano.
- Láser de picosegundo fraccionado, que es un tipo de láser no ablativo que permite una fuerte estimulación de nuevo colágeno y fibras elásticas. Es ideal para tratar ciertos tipos de cicatrices de acné, poros dilatados, o signos del envejecimiento, además permite eliminar pigmento superficial de la piel. Se puede realizar en la primavera y el verano siempre y cuando se tomen precauciones con la exposición solar los primeros días.
Estas son algunas de mis recomendaciones y tratamientos estrellas que suelo recomendar como dermatóloga a mis pacientes. Recuerda que cada piel tiene necesidades diferentes. La mejor inversión es elegir los cosméticos y tratamientos adecuados para ti, con indicación médica tras una adecuada valoración dermatológica.