EL TRIBUNAL SUPERIOR DE JUSTICIA DE LA RIOJA LO AVALA
Los compañeros de trabajo de la damnificada alertaron al departamento de sistemas de la compañía que se había ralentizado la velocidad de acceso a Internet. Tras una exhaustivo control del tráfico, los responsables del departamento llegaron a la conclusión de que la empleada utilizaba un excesivo ancho de banda.
La normativa interna de la empresa prohibía la navegación por páginas inapropiadas. Además, se advertía que la utilización de equipos electrónicos no debía generar costes adicionales a la empresa.
A pesar del aviso, la trabajadora no cejó en su empeño por violar la normativa vigente a pesar de las advertencias. La mujer visitaba páginas como, Facebook, Hotmail o Tuenti, finalmente la empresa decidió comprobar que en su ordenador se realizaban hasta 72 conexiones al día a estas plataformas.
Se procedió al despido por el Juzgado de lo Social de La Rioja alegando que "el desempeño de sus funciones no se ajusta a los parámetros de calidad y dedicación que exige la prestación de sus servicios".
La trabajadora recurrió ante el Tribunal Superior de Justicia, advirtiendo que se habían vulnerado sus derechos de intimidad al haber auditado su ordenador.