TEME POR SU PRIVACIDAD
Pocas semanas después de adquirir sus Google Glass, el desarrollador de aplicaciones de Silicon Valley, Luke Wroblewski ha confirmado en su cuenta de Twitter que el pasado domingo perdió las gafas "en algún lugar entre San José y San Diego". Probablemente, el dispositivo se le cayó del equipaje mientras pasaba los controles de seguridad en el aeropuerto.
"Según el soporte de asistencia, tengo el dudoso honor de ser la primera persona en perder unas Google Glass", añade Wroblewski en la red social. Aunque al desarrollador no le preocupa la pérdida económica, sí teme por su privacidad, ya que había asociado sus gafas a varias cuentas propias y también había empezado a desarrollar aplicaciones para el dispositivo. Y es que quien halle las codiciadas gafas podría acceder a sus datos personales y profesionales.
Wroblewski espera que la persona que encuentre sus Google Glass las devuelva, e incluso ha abierto una encuesta para sondear la opinión de los internautas al respecto. En caso contrario, el trabajador de Silicon Valley podría borrar todos sus datos asociados al dispositivo, pero tiene la esperanza de recuperarlas.
Actualmente, las Google Glass sólo pueden ser utilizadas por unos pocos afortunados, ya que no se espera que estén a la venta hasta 2014. La compañía Google ha establecido en sus cláusulas de uso que "está prohibido revender, prestar, transferir o dar a otra persona" el dispositivo, ya que en caso contrario el usuario perdería el derecho a reembolso y las gafas serían desactivadas automáticamente. No obstante, ha habido varios usuario que incluso han intentado subastar las Google Glass por eBay.