Cáncer
El laboratorio Moderna, creador también de una de las vacunas contra la COVID-19, ha anunciado que el suero contra el cáncer estará disponible a final de esta década. Según Juan Carlos Gil, Director general de Moderna en España, es una vacuna contra tumores que hasta ahora no tienen ninguna solución.
La vacuna contra el cáncer llegará en siete años. El laboratorio estadounidense Moderna ya ha puesto fecha a este avance científico. Será en 2030. Juan Carlos Gil, Director general de Moderna en España, asegura que ese suero curará los tumores que hasta ahora no tenían ninguna solución. Los ensayos se están realizando en Estados Unidos y Reino Unido y los datos son muy prometedores.
Salvaría millones de vidas
La vacuna tiene la misma tecnología que la usada contra la COVID-19. Gil cuenta que envían con el ARN mensajero un mensaje al cuerpo, y así detectan las mutaciones que provoca que las células cancerígenas se reproduzcan. De esta manera fabrica sustancias que puedan combatirlo. Estas vacunas utilizan el sistema inmune para combatir la enfermedad. En concreto, estos sueros ayudarían a entrenar al cuerpo a detectar y destruir células malignas. En su opinión eso significa que cambiaría el patrón de mortalidad porque “salvaría cientos de vidas o miles o incluso millones de vidas”. Actualmente, las dos principales causas de fallecimiento en las sociedades desarrolladas son los accidentes cardiovasculares y el cáncer.
El nuevo software de la vida
En Moderna lo llaman “el nuevo software de la vida” porque el laboratorio dice que ya saben cómo mandar un mensaje para producir nuevos medicamentos que trabajen para nosotros. El primer paso sería realizar una biopsia del tumor del paciente y extraer el material genético para secuenciarlo en un laboratorio y así poder identificar las mutaciones que no están presentes en las células sanas. Después, un algoritmo de aprendizaje automático identificaría cuáles de esas mutaciones son responsables de impulsar el crecimiento del cáncer.
Con el tiempo, esta sistema también "aprende" qué partes de las proteínas anormales que codifican las mutaciones tienen más probabilidades de desencadenar una respuesta inmunitaria. Posteriormente, se seleccionarían los ARN mensajeros para los antígenos más prometedores, que se incluirían en la vacuna. El suero, personalizado para cada paciente, se administraría después de la cirugía para evitar que el tumor vuelva.
Una nueva era de vacunas
Juan Carlos Gil dibuja un futuro muy prometedor en la lucha contra esta enfermedad. Dice que estamos en la puerta de una nueva era de vacunas. En 2030 se calcula que 21,6 millones de personas serán diagnosticadas de cáncer, de las cuales más de 330.000 en España, según datos del Observatorio del Cáncer.
Para Gil lo más novedoso es que estas vacunas y nuevos medicamentos serán diseñados para cada persona. Un fármaco específico y personalizado para su tumor. Y concluye que esa es una de las bellezas de este fármaco.