200 ACTUACIONES EN INSPECCIÓN DE PERRERAS
Agentes del Servicio de Protección de la Naturaleza de la Comandancia de la Guardia Civil de Málaga, bajo la dirección y coordinación de la Fiscalía de Medio Ambiente, han procedido a la investigación de 50 personas, entre ellas dos veterinarios, y a la intervención e inmovilización de 316 animales por supuestos delitos de maltrato y/o abandono de animales domésticos.
En la investigación, en el marco de la operación 'Malum', se inició el pasado mes de enero enmarcada en la campaña #Yosipuedocontarlo lanzada por la Dirección General de la Guardia Civil contra el maltrato y abandono animal, cuyo objetivo es concienciar a los ciudadanos para que promuevan las medidas necesarias en la protección y bienestar de los animales de compañía y denunciar las conductas contrarias de las que tuviesen conocimiento.
Esta investigación se ha desarrollado en numerosas localidades de la provincia de Málaga y ha contado con la colaboración del Colegio Oficial de Veterinarios de Málaga, de la Delegación del Gobierno de la Junta en Málaga, así como con la de varias asociaciones protectoras de animales, según han informado desde la Guardia Civil a través de un comunicado.
Así, se han llevado a cabo más de 200 actuaciones relativas a la inspección de perreras de particulares, explotaciones ganaderas, núcleos zoológicos, y refugio de animales en las que se han impuesto más de 580 infracciones administrativas a la normativa sobre animales, relacionadas principalmente con el bienestar animal, la falta de idoneidad de los alojamientos, falta de alimentación y agua, higiene animal, falta de asistencia veterinaria, registros documentales y sanitarios, entre otros.
De las actuaciones realizadas por delitos de maltrato y abandono animal destacan varias conductas, las cuales suponían un grave peligro para la vida e integridad física de los animales, llegando en algunos casos a detectarse animales muertos.
En concreto, entre otros, se han encontrado instalaciones de animales en pésimo estado higiénico sanitario, hacinados y con elementos cortantes y peligrosos para la los animales; además de animales sucios, con presencia de parásitos externos, alopecias, existencia de heridas con úlceras infectadas, apatía, desnutrición, dándose el caso de que en muchas ocasiones los animales, a pesar de encontrarse enfermos o con heridas, sus poseedores no le daban ningún tipo de asistencia veterinaria, lo que agravaba el sufrimiento.