Helicóptero DGT
El plan de vuelo había sido aprobado en febrero y se había programado para dos ocupantes, pero finalmente subió un tercero cuya identidad no ha trascendido hasta el momento.
Este jueves, han surgido más novedades sobre el accidente del helicóptero 'Pegasus' de la Dirección General de Tráfico (DGT) pilotado por un hombre que se encontraba bajo los efectos de las drogas. Se ha descubierto que, en el aparato, viajó una tercera persona, a pesar de que únicamente dos estaban autorizadas.
En el helicóptero viajaron tres personas
El plan de vuelo había sido aprobado el pasado mes de febrero y se había programado para dos ocupantes: el piloto y el operador de la cámara de vigilancia de la DGT. Sin embargo, cuatro días después del suceso, se ha conocido que había un tercer pasajero, gracias a los datos de los que disponía la torre de control de Cuatro Vientos.
Según ha informado 'El Debate', esta tercera persona sería la mujer del operador. Siempre según el citado medio, esta se dio a la fuga después del aparatoso accidente, sin dejar rastro visible y dejando a su marido, que acabó herido y fue atendido por los servicios de emergencia. Aun así, la identidad del tercer ocupante todavía no ha sido confirmada por ninguna fuente oficial
La DGT investiga el comportamiento del piloto
El piloto, que tiene 63 años. también huyó del lugar de los hechos haciendo autostop, con la finalidad de evitar la prueba de drogas. No obstante, cuando llegó a su casa, se encontró con la Guardia Civil, que le practicó el control y le detuvo tras dar positivo, acusándolo de un delito contra la seguridad aérea.
Fuentes de la DGT han indicado que se ha abierto una "información reservada" interna para examinar la forma de proceder del piloto. Se trata, según explican las fuentes, de un paso previo a la apertura de un expediente disciplinario, toda vez que la investigación sobre las causas concretas del siniestro continúa abierta.
El accidente tuvo lugar el pasado domingo. El aparato estaba en perfecto estado para volar y el detenido tenía toda la documentación en regla, pero tomó los mandosbajo los efectos de la cocaína y la anfetamina. Finalmente, media hora después de despegar, tuvo que realizar un aterrizaje de emergencia y acabaron impactando en la localidad madrileña de Robledo de Chavela.