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Crimen

Se entrega el presunto autor del asesinato de los hermanos de Morata: "Los maté por venganza, me debían 50.000 euros"

El hombre, de origen pakistaní, se habría entregado en la comandancia de la Guardia Civil de Morata de Tajuña.

La Guardia Civil ha detenido al principal sospechoso del asesinato de los tres hermanos hallados la semana pasada sin vida en Morata de Tajuña. Se trata del ciudadano de 42 años que vivió alquilado en la casa de los tres hermanos y que, el verano pasado, agredió a una de las hermanas con un martillo en la cabeza por, al parecer, no devolverle los 60.000 euros que anteriormente le había prestado.

Ha sido detenido en Arganda del Rey, en Madrid. El hombre estaba en prisión por ese suceso, condenado a dos años de prisión por un delito de lesiones, y habría perpetrado el crimen saltándose la orden de alejamiento que tenía con las víctimas.

Con fecha de 24 de febrero de 2023, este hombre ya fue detenido por un delito de lesiones con instrumento peligroso, cuya víctima fue una de las dos mujeres fallecidas.

Fue el pasado jueves cuando se localizaron los cuerpos de los tres hermanos quemados, apilados y con restos de sangre en la vivienda de Morata de Tajuña. La principal hipótesis que se baraja en este crimen es un posible ajuste de cuentas debido a las deudas que habían contraído con familiares y conocidos tras haber caído en la conocida como estafa del amor.

Entre las novedades más recientes conocidas sobre el crimen, se ha sabido que la Guardia Civil encontró el viernes un pistola de fogueo simulada en la casa encontraron los cuerpos. Los agentes creen que tenían la pistola simulada para defenderse de las personas que les habían amenazado. Ni las puertas ni las cerraduras de la casa estaban forzadas cuando entraron los agentes, mientras que las ventanas y las persianas estaban cerradas.

El ajuste de cuentas, la principal hipótesis

La principal hipótesis que baraja la Guardia Civil en este caso es el ajuste de cuentas por una deuda relacionada con una estafa amorosa. Desde el entorno de los fallecidos se ha relatado a los agentes que hace al menos un lustro las hermanas mantenían contacto con dos supuestos militares, con los que entablaron una relación pseudoamorosa a distancia.

Al cabo de un tiempo, uno de los presuntos militares les dijo que el otro había muerto y que necesitaba una gran cantidad de dinero para poder cobrar una herencia. Fue entonces cuando una de las fallecidas empezó a mandar dinero a la cuenta de su 'novio' estadounidense Edward, quien no paraba de pedirle cada vez más cantidades con diferentes excusas.

Muchos amigos y familiares les advirtieron de que habían caído en una de las llamadas estafas del amor, pero ellas insistían en que el romance era verdadero, a la vez que se endeudaban para satisfacer las demandas del supuesto amante. Llegaron a pedir dinero a desconocidos. Fueron los vecinos quienes dieron la voz de alarma a los agentes tras no haber visto a los hermanos durante un tiempo por el pueblo.