SEGÚN UN ESTUDIO
Un estudio realizado en la Universidad de La Laguna (ULL) avala los beneficios de la meditación de Sahaja Yoga en el control de la atención y las emociones.
El artículo apunta que el silencio mental experimentado a través de la meditación de Sahaja Yoga está asociada con el desarrollo de las redes y áreas neuronales que son cruciales para el control de la atención y las emociones, lo cual puede tener una repercusión positiva en la salud mental directamente y en la salud física indirectamente, ha informado la ULL en un comunicado.
En el estudio, titulado 'La materia gris y la conectividad funcional en la corteza cingulada anterior están asociadas con el estado del silencio mental percibido durante la meditación Sahaja Yoga', llevan ocho años investigando científicos de varias universidades europeas como Kings College Londres, Universidad de Leipzig y las universidades españolas Jaume I de Castellón y Universidad de La Laguna, liderados por el profesor Sergio Elías Hernández, de la ULL.
La investigación, presentada en la revista Neuroscience, fue realizada en el escáner de resonancia magnética de la Universidad de La Laguna, donde los investigadores registraron la anatomía cerebral y la conectividad funcional en estado de silencio mental durante la meditación.
Para ello, contaron con la participación de 23 voluntarios meditadores expertos en la meditación de Sahaja Yoga y también con un grupo de 23 voluntarios no-meditadores con los que se comparó la anatomía cerebral.
El estudio de la anatomía cerebral de los meditadores mostró que una región denominada la corteza cingulada anterior rostral (rACC de sus siglas en inglés), estaba directamente relacionada con la capacidad de estar en silencio mental. En esta zona rACC el grupo meditador tenía a nivel promedio un 7,5% más de materia gris que el grupo no meditador.
Además aquellos meditadores que tuvieron un silencio mental más profundo en su meditación en el escáner poseían también más materia gris en esta área que los que tuvieron un silencio mental menos duradero.
Los investigadores remarcan en la nota que según recientes publicaciones científicas, personas que sufren ansiedad, depresión, hiperactividad y déficit de atención, enfermedades psíquicas caracterizadas por la dificultad de parar los torrentes de pensamientos, al igual que otras afecciones mentales más graves como la esquizofrenia o el autismo, tienen menos materia gris en esta zona rACC. De igual forma, personas que gozan de mayor felicidad y mayor autocontrol de sus emociones poseen más materia gris en esta área.
Estos hallazgos junto con el de este estudio vienen a mostrar la importancia de este centro rACC como una importante área de control de las emociones y la atención.
Otro hallazgo importante de este estudio, destacan, fue que el silencio mental estaba asociado a una mayor conectividad funcional entre el mencionado cingulado anterior rostral, rACC, con la ínsula anterior y el putamen en ambos hemisferios, áreas encargadas de la atención interiorizada, la insula anterior, y el simple estado de gozo, el putamen.
Por otro lado, descubrieron que el estado de silencio mental producía una desconexión del rACC con el tálamo. Según los expertos, este hecho fue interpretado como una menor atención al mundo exterior en favor de una mayor atención interiorizada durante la meditación, lo que facilita la concentración en la meditación y evita que los meditadores se distraigan con ruidos o alteraciones del exterior, hecho importante si se tiene que meditar dentro de un escáner de resonancia que tiene un alto nivel de ruido sonoro asociado a su normal funcionamiento.