Enma, una joven que intentó suicidarse hace 3 años: "Yo no quería morir, pero sí poner fin al dolor que sentía"

A Enma Cocens, la muerte de su padre la sorprendió con apenas 13 años. Un hecho trágico que le dejó en estado de shock. En aquél triste momento no pudo despedirse de él, decirle que le quería y ese dolor la martirizó durante más de 10 años. "Ojalá le hubiera dicho lo que le quería. El hecho de que no le dijera nada me comió por dentro", dice con mucha tristeza.

Un dolor no curado que la martirizó durante más de diez años hasta llevarle a tener pensamientos suicidas. "Yo no pensaba que iba a salir de esto, yo pensaba que iba a estar así para siempre y por eso lo quería hacer, porque estaba sufriendo", lamenta. En ese momento y de forma equivocada, creyó que el suicidio era la única salida que veía.

Con apoyo de su familia y tratamiento psicológico ahora su vida es otra. "Estoy feliz ahora y se puede, se puede salir".

Miquel sí llegó a suicidarse

Peor suerte tuvo Miquel, el hijo de Celia Borrás, que se quitó la vida con solo 19 años por un desengaño amoroso. "Lo que quería es dejar de sufrir. El suicidio nunca se debe de contemplar como una solución a un sufrimiento", cuenta la madre.

La ayuda es imprescindible, pero a veces por falta de recursos y otras por desconocimiento, no siempre llega a tiempo.

¿Qué está pasando?

¿Se necesitan más recursos? Para la psicóloga educativa Amaya Prado, sí. De hecho dice que "la figura del psicólogo educativo dentro de los centros educativos podría prevenir y evitar situaciones como estas".

Lasalud mental de nuestros jóvenes preocupa y mucho. Sobre todo si observamos las alarmantes cifras sobre suicidios. Veintidós menores de quince años se quitaron la vida en 2021. Por encima de esa edad el dato se dispara: más de trescientos

Falta de profesionales y largas listas de espera, que en algunas situaciones, llega a ser hasta de tres meses. Por si fuera poco, algunos pacientes se quejan de que las citas médicas son cortas, de apenas veinte minutos. Mucho tiempo para un problema que no puede esperar.