Israel
Voluntarios han localizado 260 cuerpos en el desierto donde celebraban un festival que asaltó Hamás.
Al menos 260 cuerpos han sido encontrados por los servicios de emergencia israelíes en el área del desierto próxima a la Franja de Gaza donde cientos de jóvenes celebraban un festival de música electrónica la madrugada del sábado.
Los jóvenes fueron sorprendidos por Hamás en mitad del evento. Un portavoz de ZAKA, un grupo de voluntarios que se ocupa de recuperar los restos humanos tras ataques y otros desastres, ha confirmado este domingo a medios israelíes que hasta ahora se han recogido más de 260 cuerpos del lugar, situado cerca del kibbutz Reim, en el sur de Israel y próximo a Gaza.
Tablet, una revista online enfocada en noticias y cultura judía, ha entrevistado a uno de los supervivientes de esta masacre que ha asegurado que las mujeres fueron violadas junto a los cadáveres de sus compañeros.
Según asegura este testigo, muchas de las víctimas de violación después fueron ejecutadas, otras fueron llevados a Gaza.
Uno de los supervivientes, que supuestamente ha regresado al lugar, ha señalado al citado medio que los cuerpos yacían fríos y mutilados, y muchos parecían haber recibido disparos a quemarropa.
"Me sumergí en un arbusto y sentí como si los disparos vinieran desde todos los puntos. Entendí que estaremos allí al menos un par de horas, no tenía nada conmigo y pensé: lo único que quiero es un arma. Quiero algo que nos proteja", ha asegurado este testigo.
El festival fue organizado coincidiendo con la festividad judía del Sukkot. Comenzó a las 23.00 horas del viernes y duró toda la noche con miles de asistentes, en su mayoría israelíes de entre 20 y 40 años.
Dentro de las víctimas extranjeras de la ofensiva de Hamás se tiene constancia de dos tailandeses muertos y nueve nepalíes heridos, dos de ellos críticos, según han confirmado los gobiernos de ambos países.
Cientos de padres llevan desde el sábado esperando desesperadamente noticias de sus hijos desaparecidos en esta masacre que ha conmocionado a Israel y este domingo muchos se desplazaron a la comisaria de la ciudad de Lod, cerca del aeropuerto Ben Gurion, que fue habilitada como centro de denuncia de los desaparecidos.
Israel se declaró el sábado en estado de guerra, después de que Hamás lanzara un ataque múltiple, por tierra, mar y aire, que pilló al país por sorpresa, de una escala sin precedentes, con el lanzamiento de miles de cohetes e incursiones terrestres en suelo israelí, donde han masacrado y secuestrado a decenas de ciudadanos.
Hoy, el Ministerio de Asuntos Exteriores ha desaconsejado viajar a Israel mientras persista la situación actual y ante un "potencial rápido deterioro" del conflicto y los riesgos existentes, especialmente en las fronteras con Gaza, Siria, Líbano y Egipto, consideradas "zonas de alto riesgo".
En dos días, Israel ha reportado más de 700 muertos y 2.200 heridos, aunque las cifras pueden subir a medida que las tropas israelíes recuperan el control de áreas tomadas por Hamás.
Al otro lado, los fuertes bombardeos israelíes de respuesta sobre Gaza han dejado más de 430 muertos y 2.300 heridos; aunque en las últimas horas han atacado dos torres en la Franja.