Guerra Ucrania
La autorización de Estados Unidos del uso de misiles de largo alcance, ha provocado reacciones en Rusia, que advierte del riesgo de una Tercera Guerra Mundial.
Este martes 19 de noviembre se cumplen 1000 días desde el inicio de la invasión rusa a Ucrania. Durante este periodo, el conflicto ha sufrido una escalada de intensidad y alance. Además, la reciente autorización de Estados Unidos para que Ucrania utilice misiles de largo alcance en territorio ruso ha desatado fuertes reacciones en Moscú, donde se habla abiertamente del riesgo de una Tercera Guerra Mundial.
A pesar de sufrir importantes bajas a lo largo del conflicto, las fuerzas rusas han avanzado en el este de Ucrania en los últimos tiempos. Según el Instituto para el Estudio de la Guerra (ISW), el ejército ruso tomó 414 kilómetros cuadrados en octubre, su mayor avance desde el verano de 2022. Esta ofensiva tiene como principales objetivos las regiones de Donetsk y Zaporiyia, donde Rusia intenta rodear las posiciones ucranianas y consolidar su control.
A pesar de estos avances, desde Kiev insisten en que tienen lugar a un precio récord de pérdidas humanas y de material, y se aferra, como llevan haciéndolo desde el segundo año de la guerra, a la esperanza de que el Kremlin se quede sin hombres y equipamiento para suplir estas bajas.
No obstante, los combates también continúan en la región rusa de Kursk, edificio en el que Kiev lanzó una ofensa el pasado mes de agosto y controla desde entonces, ya que tres meses después del ataque el Ejercito ruso no ha podido expulsar a las tropas ucranianas. Es por ello que, según la inteligencia surcoreana, ucraniana y occidental, Putin autorizó el despliegue de 10.000 soldados norcoreanos.
Los analistas no creen que los inexpertos militares norcoreanos puedan cambiar la suerte de la guerra en Kursk, donde las unidades ucranianas se han hecho fuertes y apenas han cedido terreno. Pero la participación de fuerzas extranjeras sí podría sentar un peligroso precedente de internacionalización de la contienda que allane el camino para una mayor implicación de la OTAN.
Desde el comienzo del conflicto, Ucrania ha recibido un gran apoyo de la Unión Europea, lo cual ha sido clave para que pueda hacer frente a Rusia. La UE ha puesto a su disposición. 108.000 millones de euros en ayuda a Ucrania, mientras que la OTAN ha coordinado misiones de formación y asistencia militar valoradas en 40.000 millones de euros este año.
La autorización de Biden a Ucrania para que utilice misiles ATACMS, con un alcance de hasta 300 kilómetros, puede marcar un punto de inflexión en el conflicto. Aunque no se ha confirmado oficialmente, el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, ha habalado de estos rumores: "Hoy se ha hablado mucho en los medios de que habríamos recibido permiso para estas acciones. Pero los ataques no se hacen con palabras. Estas cosas no se anuncian. Los misiles hablan por sí solos y no hay duda de que lo harán".
El uso de misiles de largo alcance fabricados en Estados Unidos para atacar territorio ruso ha provocado reacciones en Moscú que lo ha calificado como un acto que "echa leña al fuego". "Este es un gran paso hacia el comienzo de la Tercera Guerra Mundial", ha asegurado Vladimir Dzhabarov, vicepresidente del comité de asuntos exteriores de la cámara alta y general retirado del servicio de seguridad, leal a Putin.
"Tengo una gran esperanza de que Trump revierta esta decisión si se ha tomado, porque están arriesgando seriamente el inicio de la Tercera Guerra Mundial, lo que no beneficia a nadie", ha señalado la legisladora rusa Maria Butina. Un funcionario ruso ha instado a países europeos como Reino Unido y Francia a no seguir el ejemplo de Washington, advirtiendo sobre las consecuencias para la seguridad europea.
Síguenos en nuestro canal de WhatsApp y no te pierdas la última hora y toda la actualidad de antena3noticias.com