Guerra en Gaza
Ha sido uno de los episodios más intensivos desde que comenzó la guerra en Gaza. Hezbolá ha lanzado más de 300 cohetes contra Israel. Simultáneamente Israel atacó el sur del Líbano con más de cien aviones
Israel y Hezbolá protagonizaron el domingo uno de los episodios más intensos desde que comenzó la guerra en Gaza el pasado 7 de octubre. Todo comenzó con los "ataques preventivos" del Ejército israelícontra el sur del Líbano, ataques que no impidieron que, horas después, las milicias chiíes libanesas atacaran territorio israelí con el lanzamiento de más de 300 cohetes. Estos ataques han llevado al Ministerio de Defensa de Israel a declarar el estado de emergencia militar que se prolongará al menos 2 días.
El "ataque preventivo" de Israel tenía como objetivo atacar y destruir los centros de lanzamiento de cohetes de Hezbolá. Israel ya tenía conocimiento de que la ofensiva se podría producir esa misma noche. Por su parte, los objetivos de Hezbolá fueron atacar el norte y centro de Israel. Ambos ataques comenzaban casi simultáneamanete, alrededor de las 05.00 de la madrugada, 04.00 hora española
El intercambio de ataques ha dejado, por ahora, tres muertos en el Líbano, confirmados por el Ministerio de Salud libanés en su apartado de víctimas y daños materiales. El primer fallecido ha sido identificado como Ayman Kamel Idriss, combatiente del Movimiento Chií Amal, (organización política chií moderada del Líbano), y aliado de Hezbolá. Al parecer, una bomba habría impactado contra el vehículo en el que viajaba en la localidad de Jiam. El fallecimiento de las otras dos persona se localiza en la población de At Tiri. Hezbolá ha reconocido la muerte de estos dos combatientes, sin embargo, aún no se han publicado sus identidades.
Por otro lado, en Israel, el portavoz internacional de las Fuerzas de Defensa, Nadav Shoshani, ha declarado que los bombardeos de Hezbolá se han saldado con "daños mínimos". Herzi Halevi, el jefe del Estado Mayor israelí ha destacado que "desde el comienzo de la guerra, Hezbolá ha perdido muchos activos importantes y cientos de miembros" y ha prometido seguir con los ataques, para, según él "que los habitantes del norte puedan regresar a sus hogares de manera segura", "Estamos muy decididos y seguiremos haciendo todo lo posible para proteger a los ciudadanos de Israel en todas partes".
Según Hezbolá se han lanzado, al menos, 320 cohetes y aviones no tripulados en una operación que ellos mismos han descrito como la "primera fase" de la ofensiva en respuesta al asesinato del comandante Fuad Sukr el mes pasado, en un ataque aéreo atribuido a Israel en Beirut, capital del Líbano.
Esta ofensiva ha sido dirigida contra una docena de posiciones y bases militares israelíes, repartidas por toda la frontera del norte de Israel. Entre sus objetivos principales se encontraban la base de Gliot, cerca de Herzliya, donde tienen varias unidades de inteligencia del Ejército. También el cuartel general del Mossad, el servicio de Inteligencia exterior de Israel.
Un centenar de cazas israelíes formaron parte del ataque en el sur del Líbano. "Atacamos más de 40 sitios de lanzaderas de Hezbolá tras detectar que preparaban un ataque" aseguran fuentes israelíes. Aún así, esta ofensiva con la intención, según Israel, de neutralizar el disparo de centenares de misiles, proyectiles y drones, así como bombardear depósitos de armas, no fue suficiente para paralizar la respuesta. El primer ministro Benjamín Netanyahu ha declarado que "lo que ocurrió hoy no es el final de la historia. Hezbulá intentó atacar Israel. Ordenamos un intenso ataque preventivo para eliminar la amenaza".
Una vez acabada la ofensiva, el ministro de Defensa israelí declaró el estado de emergencia militar que da potestad al ejército de dar instrucciones a los ciudadanos de Israel, como limitar reuniones o cerrar lugares cuando sea necesario.
Ben Guiron, el aeropuerto más importante del país, ubicado a las afueras de Tel Aviv, estuvo cerrado durante horas para proteger el espacio aéreo nacional. Las restricciones se aplicaron en todo el territorio israelí. Fue al medio día cuando se levantaron las prohibiciones en Tel Aviv y alrededores, aunque aún se mantienen en el norte y los Altos del Golán ocupados. El primer ministro, Benjamin Netanyahu, ha mantenido una reunión de emergencia con su cúpula de seguridad donde se han trazado las líneas maestras de este Estado de Emergencia: "Estamos decididos a hacer todo lo posible para proteger a nuestro país, devolver a los habitantes del norte sanos y salvos a sus hogares y a seguir una regla sencilla: a quien nnos haga daño, también se lo haremos nosotros".
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