Justicia
José Antonio Griñán, el expresidente de la Junta de Andalucía, fue condenado a seis años y un día de cárcel por el fraude en los expedientes de regulación de empleo (ERE).
La Audiencia de Sevilla ha solicitado nuevos informes forenses para intentar que José Antonio Griñán, el que fue el presidente socialista de la Junta de Andalucía entre los años 2009 y 2013, entre en prisión cuanto antes para hacer frente a la condena interpuesta por los jueces de 6 años y un día en la cárcel tras estar implicado en el caso de los ERE.
Así lo ha manifestado el juzgado de la capital andaluza en la nueva providencia del caso publicada este martes por la Oficina de Comunicación del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA), en la que piden a la defensa de Griñán que aporte "todos los informes médicos de los que disponga a fin de proceder a un nuevo reconocimiento médico por parte del Instituto de Medicina Legal (IML)", con la idea de intentar comprobar si el expresidente socialista puede continuar el tratamiento del cáncer de próstata que padece dentro de la cárcel.
En esta providencia la defensa de José Antonio Griñán adjunta una nueva documentación en la que se aseguran que ha puesto fin a las sesiones de radioterapia que se desprenden de la enfermedad que padece, por lo que piden que se suspenda su pena en prisión y solicitan un nuevo informe forense en el que se aclare si "es compatible" enfrentarse a la condena y recibir el tratamiento farmacológico y de rehabilitación al mismo tiempo.
Con respecto a estas exigencias, la Audiencia de Sevilla solicita "a la mayor brevedad posible" un nuevo informe al Instituto de Medicina Legal (IML) para solucionar la entrada en prisión de Griñán, a la vez que valorarán el convenio que Servicio Andaluz de Salud (SAS) mantiene con el Centro Penitenciario sevillano sobre la atención médica "especializada", con el que los pacientes de la cárcel son derivados a los "procesos de atención integral" teniendo en cuenta "los procedimientos terapéuticos tales como sesiones de quimioterapia o radioterapia", según informan desde la agencia de noticias 'Europa Press'.
Radioterapia en la cárcel
El medio 'OKDIARIO Andalucía' ha tenido acceso a unos datos del año 2021 en los que se asegura hace dos años los presos españoles se sometieron a un total de 535 sesiones de radioterapia, por lo que muchos consideran la situación de Griñán es privilegiada, pues mismamente el expresidente de la Generalitat Valenciana, Eduardo Zaplana, estuvo en prisión preventiva durante nueve meses mientras padecía un cáncer. Asumiendo la condena, Zaplana salía una vez por semana de la cárcel para recibir el tratamiento de quimioterapia y así poder combatir paralelamente con el tumor que sufría.
El antecedente en Agustín Barberá
Durante el pasado mes de abril, Agustín Barberá, el exviceconsejero socialista de Empleo, fue acusado de un delito de malversación en el proceso específico de financiación de los ERE, razón por la que recibió la condena de siete años y un día de cárcel. Ingresó en la cárcel de Puerto III de El Puerto de Santa María (Cádiz), tras el rechazo de la Audiencia de Sevilla de la petición de la defensa de Barberá de intentar no hacer frente a la pena por la situación de enfermedad en la que se encontraba. Se le habilitó un plazo de diez días naturales para ingresar de forma voluntaria en la cárcel, a pesar de que alegaba padecimientos incurables contra su enfermedad.
La Sección Primera de la Audiencia de Sevilla reconocía ciertamente que Barberá "padece una enfermedad grave incurable" pero aseguraba que el tratamiento que el exconsejero recibiese en la cárcel puede ser dispensado "con las revisiones hospitalarias a que deba ser sometido", según cita 'Europa Press'.