José Antonio Griñán
El Ministerio Público defiende en un comunicado que la entrada en prisión "deberá suspenderse entretanto" llegan los nuevos informes.
La Fiscalía Anticorrupción ha reclamado que se suspenda la entrada en prisión del expresidente de la Junta de Andalucía, José Antonio Griñán, condenado a seis años por delitos de malversación y prevaricación en el caso de los ERE. Griñán sufre un cáncer de próstata y los forenses solicitaron que no ingresase en prisión ya que podría empeorar su salud. Anticorrupción solicita más informes sobre su enfermedad al Instituto de Medicina Legal de Sevilla y a médicos de la cárcel.
El Ministerio Público defiende que el ingreso en prisión "deberá suspenderse entretanto" llegan los nuevos informes. Así lo detallan en un escrito a la Sección Primera de la Audiencia de Sevilla. Los fiscales delegados en Sevilla de la Fiscalía Especial contra la Corrupción y la Criminalidad Organizada indican que "a la vista del informe emitido por el Instituto de Medicina Legal de Sevilla de fecha 3 de enero de 2023", se deberá suspender de momento la entrada.
"Teniendo en cuenta la cercanía del diagnóstico de Griñán y el hecho de que el tratamiento no se ha iniciado", Anticorrupción concluye "la no conveniencia de su ingreso en centro penitenciario hasta tanto se confirme la remisión, en su caso, de su patología oncológica por los Servicios de Urología y de Oncología Radioterápica".
Existe la "necesidad de que, una vez recibida la información solicitada y emitido nuevo informe por el IML, se recabe el informe de los servicios médicos penitenciarios del Centro de Sevilla", reza el escrito recogido por Europa Press.
Los forenses recomendaron que no ingrese en prisión
El informe médico de los forenses encargados de valorar el estado de salud de José Antonio Griñán recomendó que el expresidente de la Junta de Andalucía no entre en prisión porque perjudicaría a su tratamiento contra el cáncer de próstata, que es "muy grave".
Advirtieron que el ingreso en un centro penitenciario "incrementaría el riesgo de fracaso del tratamiento iniciado, dificultaría su control por especialistas en onco-urología y "podría reducir su expectativa de vida". Griñán está condenado a seis años de cárcel y otros 15 de inhabilitación por delitos de prevaricación y malversación.
El Supremo explicó que el expresidente de la Junta de Andalucía "continuó con el 'sistema creado' por otros, que tenía por objeto evitar los controles del destino de los fondos" y "desoyó los controles sobre el destino de los fondos".