Coronavirus
El Impuesto sobre Vehículos de Tracción Mecánica (IVTM), o más conocido como impuesto de circulación, es un impuesto que grava la titularidad de los vehículos de tracción mecánica aptos para circular por las vías públicas.
Se trata de un impuesto directo y anual (ya que se paga una vez al año) que acompañará a nuestro vehículo a lo largo de su vida útil. Los ayuntamientos se encargan de su gestión, recaudación y de fijar su coste, que es diferente en cada distrito municipal. Además, el tipo de coche que tengamos influye en su coste.
Generalmente, el impuesto de circulación se paga entre el 1 de abril y el 2 de junio, aunque muchos ayuntamientos han decidido ampliar o cambiar el plazo del pago de este impuesto debido a la pandemia del coronavirus.
Por ejemplo, Madrid ha cambiado sus plazos y ahora este impuesto se paga del 1 de mayo al 30 de junio. En Barcelona, se ha ampliado la fecha límite por el coronavirus y ahora se puede pagar la tasa hasta el 3 de julio. En Valencia, este impuesto se paga entre el 1 septiembre y el 31 de octubre.
El impuesto de circulación se puede domiciliar o pagarse directamente en alguna de las oficinas bancarias colaboradoras.